El presidente López Obrador no se midió al hablar de la gobernadora Maru Campos, y le lanzó una serie de calificativos que más que ser parte del debate por los libros de texto gratuito, son una grosería y falta de respeto.
Claro, el hecho de llamar irresponsable, conservadora, reaccionaria y politiquera, a una mujer, fue aplaudido por los morenistas, quienes están acostumbrados a alabar cualquier estupidez que salga de la boca del presidente.
En Chihuahua el hecho despertó reacciones, y no tardaron en salir los fanáticos, Cuauhtémoc Estrada, Juan Carlos Loera y compañía.
El tema es bastante serio, porque aunque la Suprema Corte ya emitió sus razones fundamentales para ordenar la detención del reparto de libros, AMLO y los morenistas insisten que es un acto de corrupción por parte de un ministro conservador.
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De las oficinas de la Secretaría de la Coordinación del Gabinete Estatal que comandaba el sonorense Luis Serrato, se han visto salir varias personas, quienes al parecer son los encargados de realizar el proceso de entrega – recepción.
Esto a pesar de que aún no se sabe a quién se le entregarán las diferentes áreas, ante la inminente desaparición de esa secretaría, creada desde el sexenio de Reyes Baeza, sólo para acomodar a gente de confianza.
Se dice en los pasillos del Palacio que el flujo de personas se debe en parte a las revisiones que hace la Secretaría de la Función Pública y se empalma con el trabajo que está haciendo la Auditoría Superior del Estado. “Nada personal, jale de rutina”, han dicho los encargados.
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Los informes que hace semanalmente la Secretaría de Seguridad Pública Estatal, no sólo comienzan a aburrir a la gente, pues los hacen iniciando la semana y desde temprana hora, pero sin que haya información relevante qué dar a conocer.
Aquí se utiliza el dicho de “hablar por hablar”, pues las últimas semanas el secretario Gilberto Loya sólo ha estado presente una vez y sin tener nada importante qué decir, incluso ha echado por enfrente a sus subsecretarios para saquen a flote las conferencias.
Entre broma y broma, se dice que esas ruedas de prensa tienen el único objetivo de echarle sal a las heridas de la Fiscalía General del Estado que dirige César Jáuregui, pues lo único que hacen es recordarle a la gente, todas las desgracias y tragedias que se han vivido durante el año.
