México.- El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reveló que la inflación en México experimentó un descenso sorprendente, ubicándose en un 4.45% anual durante la primera quincena de febrero.
Esta cifra representa una disminución significativa desde el 4.87% registrado en la segunda quincena de enero. La noticia impacta favorablemente, ya que se sitúa por debajo de las expectativas del mercado, que estimaban una tasa del 4.73% anual según la encuesta más reciente de Citibanamex.
Tendencia a la Baja por Segunda Quincena Consecutiva
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) evidenció una tendencia a la baja por segunda quincena consecutiva, con una caída del 0.10% en su comparación quincenal.
Este fenómeno no se observaba para un mismo periodo desde 2019, marcando un punto de inflexión en la dinámica inflacionaria. La noticia refleja un comportamiento moderado que contrasta con las estimaciones del mercado y destaca la estabilidad en el índice de precios.
Componente No Subyacente: Factores Clave en la Modulación
El componente no subyacente desempeñó un papel fundamental en la modulación de la inflación, registrando una tasa del 3.93% anual en la primera quincena de febrero. Este descenso interrumpió una racha de siete quincenas al alza.
Entre los factores destacados, los productos agropecuarios experimentaron una inflación del 5.69% anual, evidenciando la volatilidad característica de estos elementos. Específicamente, el precio de frutas y verduras presentó una notable caída quincenal del 7.20%, contribuyendo al panorama de estabilidad en los precios.
Este panorama alentador se reflejó también en los energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno federal, que registraron una inflación del 2.44% anual en la primera mitad de febrero. Este dato representa un aumento respecto al 1.44% registrado al cierre de enero.
Por otro lado, la inflación subyacente se situó en un 4.63%, manteniendo una tendencia a la baja durante 25 quincenas consecutivas. Este comportamiento se traduce en una moderación tanto en las mercancías, con una inflación del 4.09% anual, como en los servicios, que mostraron una leve disminución del 5.28% respecto al periodo anterior.
