
Científicos creen que eventualmente podríamos transferir la resistencia de los tardígrados a nuestras células, retrasando el envejecimiento y mejorando la preservación de células para trasplantes de órganos.
No es de extrañar que el interés científico por los tardígrados no haya disminuido. Estas criaturas microscópicas, también conocidas como osos de agua, han demostrado ser capaces de soportar condiciones extremas que serían letales para casi cualquier otra forma de vida. Desde sobrevivir a temperaturas cercanas al cero absoluto hasta soportar la exposición directa al vacío espacial, los tardígrados parecen tener superpoderes. Además, pueden permanecer en un estado de deshidratación profunda durante décadas, sobreviviendo sin comida ni agua, y soportar niveles de radiación que serían mortales para los humanos.
La clave de su supervivencia se encuentra en su capacidad para entrar en un estado de animación suspendida llamado biostasis, durante el cual se convierten en una especie de bola deshidratada y su metabolismo se reduce a niveles casi indetectables. Esta habilidad no solo es fascinante, sino que podría tener aplicaciones prácticas para la ciencia médica y la biotecnología.
Ralentizar los procesos metabólicos
Siguiendo esta línea de investigación, un equipo de la Universidad de Wyoming (UW) ha dado un paso adelante en la comprensión de cómo los tardígrados manejan estas hazañas aparentemente imposibles. Su estudio, publicado en la revista Protein Science, se centra en las proteínas específicas que estos animales utilizan para entrar y salir de la biostasis bajo condiciones de estrés ambiental severo.
La investigadora Silvia Sánchez-Martínez, junto con el equipo del profesor adjunto Thomas Boothby, del Departamento de Biología Molecular de la UW, ha descubierto que una proteína de tardígrado, denominada CAHS D, juega un papel crucial en este proceso. Al introducirse en células humanas, esta proteína adopta una forma gelatinosa, ralentizando los procesos metabólicos de manera similar a como ocurre en los tardígrados.