Arabia Saudita.- Arabia Saudí marcó un hito al abrir su primera licorería en más de 70 años, un paso significativo en la apertura social de un reino que alguna vez fue ultraconservador.
Aunque restringida a diplomáticos no musulmanes, la tienda en Riad simboliza un cambio en las costumbres en un esfuerzo por convertir al país en un destino turístico y de negocios.
Desafíos Internos y Externos
A pesar de los intentos de transformación liderados por el príncipe heredero Mohammed bin Salman, persisten desafíos tanto a nivel internacional, debido a la reputación tras el asesinato de Jamal Khashoggi, como internamente, por las conservadoras costumbres islámicas arraigadas en el país.
La licorería, ubicada en el distrito diplomático, presenta un avance, pero el camino hacia una apertura total sigue siendo complejo.
Nuevas Normas para la Venta de Alcohol a Diplomáticos
La apertura de la licorería coincide con nuevas normas para la venta de alcohol a diplomáticos en el reino, destinadas a controlar la importación de estos productos.
Las medidas buscan regular la distribución de licores especiales. Aunque la tienda actualmente vende licores, vino y solo dos tipos de cerveza, refleja una evolución en las políticas respecto al consumo de alcohol en un país donde previamente se recurría al contrabando o a la elaboración casera.
Las autoridades saudíes no han comentado oficialmente sobre la apertura de la licorería ni sobre las nuevas normas. A pesar de los avances, la sociedad saudí sigue siendo cautelosa en la adopción de costumbres más liberales, evidenciando la complejidad de los cambios sociales en un país con profundas raíces conservadoras.
