Llega la inflación con ritmo a la baja a 4.67% en primera quincena de agosto

Ciudad de México.- En la primera quincena de agosto, la inflación general en México mostró una desaceleración, registrando un 4.67 por ciento anual, en comparación al 4.78 por ciento al cierre de julio. Esta tendencia a la baja se ha mantenido durante siete periodos consecutivos, según el informe del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Sin embargo, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) superó las previsiones del mercado al ubicarse por encima de la tasa esperada del 4.63 por ciento anual, de acuerdo con la encuesta más reciente de Citibanamex. Cabe destacar que este dato para la primera mitad de agosto es el más bajo desde la primera quincena de marzo de 2021.

Moderación en precios subyacentes y no subyacentes

El análisis detallado de los datos revela una tendencia de moderación en los precios tanto de la inflación subyacente como en la no subyacente. La inflación subyacente, que excluye los precios más volátiles como energéticos y agropecuarios, se ubicó en un 6.21 por ciento anual. Este valor, que refleja de manera más precisa el comportamiento inflacionario, mostró una disminución durante 13 quincenas consecutivas y resultó mejor al 6.24 por ciento previsto por los analistas. Además, este dato marca el punto más bajo desde la primera quincena de enero del año pasado.

Respecto a la quincena anterior, la inflación subyacente experimentó una aceleración de 0.19 por ciento, en comparación al 0.09 por ciento registrado al cierre de julio. Por otro lado, la desaceleración de la inflación general se atribuyó en parte al comportamiento de las mercancías, que presentaron una inflación anual del 7.06 por ciento, extendiendo su tendencia a la baja durante 15 quincenas consecutivas. Sin embargo, los servicios experimentaron una aceleración, alcanzando un 5.19 por ciento anual desde el 5.18 por ciento en la segunda quincena de julio.

Energéticos y productos agropecuarios en foco

En el segmento no subyacente, la inflación marcó un 0.13 por ciento anual, rompiendo una racha de tres quincenas con deflación. Este repunte se atribuye a las presiones al alza en los precios de los productos agropecuarios, que registraron una inflación anual del 3.98 por ciento, la más alta desde la segunda quincena de mayo de este año.

Paralelamente, los energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno mantuvieron su ritmo deflacionario durante el décimo periodo consecutivo, con una deflación del 3.13 por ciento anual en la primera quincena de agosto. Dentro de este grupo, los energéticos experimentaron una deflación del 6.67 por ciento anual, extendiendo su tendencia negativa durante 11 quincenas. En contraste, las tarifas gubernamentales mostraron una inflación del 5.35 por ciento anual.

En conclusión, la primera quincena de agosto revela una continuación en la desaceleración de la inflación general en México, aunque con ciertas áreas, como los servicios, mostrando señales de aceleración. La disminución en la inflación subyacente y la persistente deflación en energéticos son factores clave que contribuyen a esta tendencia.