California.- Joanne Marian Segovia, directora ejecutiva de la Asociación de Oficiales de Policía de San José, fue detenida la semana pasada como sospechosa de importar drogas para distribuirlas en los Estados Unidos, informaron las autoridades de California.
Segovia, presuntamente importó opioides sintéticos ilegales de India y otros países y al menos una vez usó la computadora y la dirección de su trabajo y la cuenta de UPS del sindicato para enviar las drogas dentro del país, dijeron los fiscales federales.
La directora fue acusada de intentar importar ilegalmente valeryl fentanilo, un opioide sintético, dijeron los fiscales federales en un comunicado el miércoles. Si es declarada culpable, enfrenta hasta 20 años de prisión.
A partir de 2015, Segovia recibió al menos 61 envíos de drogas por correo a su casa en San José desde India, Hong Kong, Hungría y Singapur con manifiestos que enumeraban su contenido como “obsequios de boda”, “regalo de maquillaje”, “chocolate y dulces” y “suplemento alimenticio”, según una denuncia penal federal revelada el martes.
No se supo de inmediato si Segovia, de 64 años, tiene un abogado que pueda hablar en su nombre, según lo publicado por The Associated Press.
Tom Saggau, portavoz del sindicato de policías en San José, dijo que Segovia, un civil, ha trabajado para el sindicato desde 2003, planificando funerales para los oficiales que mueren en el cumplimiento del deber, siendo el enlace entre el departamento y las familias de los oficiales. y organizar festividades de oficina y eventos para recaudar fondos.
Dijo que funcionarios federales informaron al sindicato el viernes pasado que Segovia estaba bajo investigación y que nadie más en el sindicato estaba involucrado o sabía de los presuntos actos de Segovia.
La revelación conmocionó a sus colegas, dijo Saggau.
“No teníamos ningún motivo para sospechar de ella”, dijo, y agregó que la junta directiva del sindicato se comprometió a apoyar plenamente la investigación federal.
Los fiscales federales dijeron que en 2019, los oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. interceptaron un paquete enviado a su domicilio que contenía Tramadol, un opioide sintético, por un valor de $ 5,000, y le enviaron una carta diciéndole que estaban incautando las píldoras.
Al año siguiente, la CBP volvió a interceptar un envío de Tramadol valorado en $700 y le envió una carta de incautación, según muestran los registros judiciales.
Pero los funcionarios federales no comenzaron a investigar a Segovia hasta el año pasado cuando los investigadores encontraron su nombre y domicilio en el teléfono celular de un presunto traficante de drogas que forma parte de una red que envía sustancias controladas fabricadas en India al Área de la Bahía de San Francisco, según la queja.
Esa red de narcotraficantes ha distribuido cientos de miles de pastillas en 48 estados, dijeron fiscales federales.
Segovia usó el servicio de mensajería de WhatsApp y las computadoras personales y de su oficina para pedir miles de tabletas de opioides y otras píldoras a su casa y acordó distribuir las drogas en otros lugares de los Estados Unidos, dijeron los fiscales.
En al menos una ocasión en 2021, Segovia envió las drogas ilícitas a una dirección de Carolina del Norte utilizando la cuenta de UPS del sindicato policial, dijeron los fiscales. Esa dirección está vinculada a al menos cinco incautaciones de drogas ilícitas, dijeron.
Los investigadores encontraron cientos de fotografías en un chat de WhatsApp en el teléfono celular de Segovai, incluida una imagen de la boleta de envío de UPS y otra de una pantalla de computadora que mostraba un pago de PayPal a un nombre indio y las tarjetas comerciales del sindicato de policías de Segovia debajo.
“Según mi capacitación y experiencia, sé que los remitentes de sustancias controladas a menudo envían recibos y números de seguimiento como prueba de que, de hecho, enviaron un paquete. Creo que ella ofreció el recibo proporcionado por SEGOVIA como prueba de que envió un paquete al destinatario de Carolina del Norte”, escribió en la declaración jurada David Vargas, agente especial de Investigación de Seguridad Nacional.
Según la denuncia, Segovia siguió ordenando sustancias controladas incluso después de haber sido entrevistado por investigadores federales en febrero. El 13 de marzo, agentes federales incautaron un paquete en Kentucky, que contenía valeryl fentanyl, dirigido a Segovia. El paquete supuestamente se originó en China tres días antes y declaró su contenido como un “reloj”, dijeron los fiscales.
Con información de Debate
