*Fiscalía y sus marranadas *¡A declarar corruptos! *Los entramados de Corral

Ha pasado una semana del asesinato de dos internos del Cereso de Aquiles Serdán, a quienes, según se informó, se les inyectó alguna sustancia desconocida para privarlos de la vida, con tan sólo algunas horas de diferencia; los cuerpos fueron trasladados a las instalaciones del C4 para realizarles la necropsia, pero llama la atención que, según las propias autoridades, hasta el momento se desconoce la sustancia que se les inyectó.

Esto último lo aseguró el fiscal Roberto Fierro Duarte, pero ¿acaso espera que le creamos? Es difícil pensar que hasta el momento «los expertos» del C4 no hayan determinado qué fue lo que se les inyectó que los hizo perder la vida, sobre todo, cuando se trata de un caso tan relevante y que exige una atención urgente, pues se debe detectar la sustancia para poder llegar a los presuntos responsables.

Pero ahí no acaba todo, pues trascendió que uno de los muertos, fue trasladado a Ciudad Juárez para darle cristiana sepultura, y durante el velorio, el cual se realizaba la noche del viernes en un domicilio de aquella ciudad, un grupo de hombres armados atacó a los dolientes, dejando a otras seis personas muertas.

Es una verdadera masacre la cual ya ni extraña que sea minimizada por las autoridades que tenemos, sobre todo por la Fiscalía General del Estado, quienes debieron advertir la situación en que se encontraba involucrado el difunto y prever lo que podría ocurrir, pero no, ellos todavía no saben si fue cloro, thinner o un buen pasón de heroína lo que privó de la vida a los dos internos…y según se escucha en pasillos de Fiscalía, van a salir a decir que fue una sobredosis para no meterse en tanto rollo.

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Caiga quien caiga, sea El Pony Lara, Manuel Soledad, Jorge Issa, Fernando Álvarez Monje, o hasta el mismísimo Papa, dijo la gobernadora Maru Campos, respeto a la cloaca fraudulenta que se destapó y que está relacionada con el asesinato del ex de la JMAS, René Villarreal.

Maru Campos fue muy clara e insistente en decir que no habrá tolerancia para los involucrados, y de pasadita, advirtió que ya le leyó la cartilla al Pony Lara, pues uno de los principales involucrados y que hoy está muerto, fue uno de sus empleados de confianza, por lo que calladito, calladito, todos sospechan que sabe algo y no lo quiere decir.

También el fiscal Roberto Fierro, se sumó a las advertencias, y ya dijo de una vez que todo mundo será llamado a declarar, para que se vayan preparando y que luego no les extrañe que los anden buscando, aún y cuando sean servidores públicos o que pertenezcan a la administración estatal.

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Y se siguen cayendo los entramados que dejó Javier Corral y su pésimo y chafa equipo jurídico que mal dirigía el fiscal César Peniche y que operaba desde el Poder Judicial, Lucha Castro, Pablo Héctor González y compañía.

En esta ocasión, a tan sólo unos días de la liberación de Gerardo Villegas, ex director administrativo de la Secretaría de Hacienda del sexenio de César D., ahora se informó que un Tribunal Colegiado, ordenó la restitución de Joaquín Sotelo Mesta, como Consejero de la Judicatura.

Pese a todas las arbitrariedades y ridiculeces que se orquestaron en el Ejecutivo, Judicial y tristemente en el Legislativo, las falsas acusaciones y señalamientos distorsionados, terminaron por caerse, y aunque Sotelo Mesta no es una blanca palomita, en esta ocasión se ha salvado, y es que su peor pecado, fue haber señalado con su dedo las irregularidades que se venían desde Corral y Lucha Castro en la designación de jueces y magistrados en el Poder Judicial del Estado.