Sequías y altas temperaturas aumentarían la inflación en México

México.- El impacto del clima en la inflación en México está generando preocupación, pues las sequías y las altas temperaturas comienzan a afectar el costo de productos básicos como frutas y verduras. Este efecto climático podría agravar el problema inflacionario y complicar los esfuerzos para contener la inflación en el país.

En abril, la inflación general se ubicó en 4.65 por ciento anual, un aumento con respecto a marzo, que registró 4.42 por ciento. Este repunte estuvo en gran parte impulsado por el alza en precios de frutas y verduras, que reflejaron un crecimiento mensual de 3.94 por ciento, el más alto para el mismo mes desde 2021, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

El investigador Luis Monroy-Gómez-Franco, del Departamento de Economía de la University of Massachusetts, indicó en su cuenta de X que las condiciones climáticas podrían estar desempeñando un papel importante en la inflación actual. Él sugiere que existe una correlación entre el grado de sequía en las regiones agrícolas del país y la subida de precios. Este fenómeno podría ser un obstáculo para la política monetaria en el combate contra la inflación.

El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) informó que, a finales de febrero de este año, casi el 70 por ciento de la población en México estaba afectada por sequías, con cerca del 50 por ciento en áreas de sequía severa, extrema o excepcional. Esto ha tenido un efecto directo en el costo de los productos agrícolas.

De los 31 tipos de frutas y verduras que el INEGI monitorea, 26 experimentaron una inflación anual por encima del promedio general del 4.65 por ciento. De estos 26, 25 registraron tasas de doble dígito, reflejando la fuerte presión inflacionaria en este sector. Entre los productos más afectados están la cebolla, con una inflación anual de 82.53 por ciento, el pepino con 58.56 por ciento, y el tomate verde con 57.10 por ciento.

El alza en los precios de frutas y verduras podría tener un efecto en cadena, afectando a restaurantes y otros establecimientos que dependen de estos insumos. Con el aumento de costos, estos negocios podrían verse obligados a incrementar sus precios, trasladando el impacto inflacionario al consumidor final.

La persistencia del clima adverso plantea desafíos para el proceso productivo, y la escasez de oferta podría hacer que los precios sigan aumentando en los próximos meses. Esta situación pone en alerta a las autoridades y a los consumidores, que tendrán que lidiar con un panorama inflacionario complicado por las condiciones climáticas.