Estados Unidos.- Jennifer y James Crumbley, padres del adolescente Ethan Crumbley, quien perpetró un tiroteo en la escuela secundaria Oxford en 2021, recibieron sentencias de prisión el martes por homicidio involuntario, marcando un caso excepcional donde los padres enfrentan consecuencias legales por un tiroteo escolar.
Durante la audiencia de sentencia en el condado de Oakland (Michigan), varios padres de las víctimas expresaron su dolor y angustia, culpando a los Crumbley por la tragedia. Nicole Beausoleil, madre de Madisyn Baldwin, de 17 años, declaró: “No sólo su hijo mató a mi hija, sino que ustedes dos también lo hicieron”, mientras James Crumbley permanecía impasible.
Culpabilidad y Arrepentimiento
Ethan Crumbley, de 15 años en el momento del tiroteo, ya había sido sentenciado a cadena perpetua sin libertad condicional. Jennifer Crumbley, de 46 años, expresó su profundo dolor y sorpresa por las acciones de su hijo, lamentando la tragedia y ofreciendo disculpas a las víctimas y sus familias. Por su parte, James Crumbley, de 47 años, expresó su pesar por las pérdidas sufridas.
Los fiscales argumentaron que los Crumbley fueron negligentes al proporcionar un arma a su hijo como regalo de Navidad y al no abordar sus problemas de salud mental y comportamiento violento. Esta sentencia marca un paso significativo en responsabilizar a los padres por la violencia armada perpetrada por sus hijos, según expertos en seguridad y defensores del control de armas.
