África.- A diez años del brote más devastador del virus del Ébola en África Occidental, que cobró más de 11 mil vidas, surge una preocupación: la falta de acceso a tratamientos aprobados.
Médicos Sin Fronteras (MSF) lamenta que, aunque existen opciones de tratamiento, estos no están disponibles en una reserva de emergencia para ser utilizados en futuros brotes.
Tratamientos Bajo Control Privado
Los tratamientos aprobados contra el Ébola, como el Inmazeb de Regeneron y el Ebanga de Ridgeback, están bajo el control exclusivo de dos empresas farmacéuticas estadounidenses. Esta situación plantea un desafío en el acceso, ya que la mayoría de los tratamientos se reservan para seguridad nacional y biodefensa de Estados Unidos.
MSF hace un llamado urgente a la creación de una reserva internacional de emergencia, gestionada por el Grupo Internacional de Coordinación, para garantizar el suministro rápido y equitativo de tratamientos en cualquier lugar donde se necesiten. Esto sería fundamental para salvar vidas y controlar brotes futuros.
Acceso Global y Solidaridad
Para abordar la falta de acceso, MSF insta a los titulares de patentes a otorgar licencias y transferir tecnología a fabricantes capacitados, asegurando así una producción más amplia de tratamientos contra el Ébola.
Este enfoque es crucial para evitar una tragedia similar a la ocurrida hace una década y garantizar un acceso equitativo a las herramientas médicas necesarias.
