¿Qué pasa con tu hígado al dejar de tomar alcohol?

Imagina que el hígado es como un superhéroe dentro de tu cuerpo. Su trabajo principal es deshacerse de cosas malas, como el alcohol. Cuando bebes mucho, el hígado trata de protegerte, pero a veces se lastima.

Cuando alguien bebe mucho, el hígado se pone “gordito” al principio. Pero, ¡buena noticia!, si dejas de beber por unas semanas, el hígado puede curarse y volver a ser como nuevo.

Si la cosa va más lejos y el hígado se lastima mucho, puede llenarse de cicatrices, como cuando te cortas y se forma una costra. Esto se llama cirrosis, y es grave. En casos extremos, la gente puede ponerse amarilla, hincharse y sentirse cansada y confundida.

“Hay que tomar alcohol con moderación”

Aquí está la buena noticia otra vez: si alguien deja de beber en las etapas tempranas, el hígado puede mejorar mucho. Pero si ya está muy lastimado, no puede volver completamente a la normalidad.

Además, dejar de beber trae otros beneficios, como dormir mejor, pensar con más claridad y tener menos riesgo de enfermedades como el cáncer.

Así que, para cuidar tu hígado, es bueno beber con moderación y tomar unos días sin alcohol cada semana. Recuerda, ¡tu hígado es como un superhéroe, pero también necesita tu ayuda para mantenerse fuerte!

Artículo original publicado en The Conversation