Londres.- Londres se encuentra conmocionada por el escalofriante caso de Lucy Letby, la enfermera neonatal declarada culpable de asesinar e intentar asesinar a bebés en el hospital donde trabajaba entre 2015 y 2016. Durante el extenso juicio de 10 meses, la fiscalía presentó una serie de posibles motivos detrás de sus crímenes, arrojando luz sobre la mente de la enfermera que dejó una estela de muerte y sufrimiento en su camino.
Nick Johnson KC, el fiscal a cargo, sugirió que Letby encontraba placer en “jugar a ser Dios”, dañando a los bebés y luego alertando a sus colegas sobre el deterioro de su salud. De acuerdo con el diario The Guardian, Johnson presentó comentarios que la fiscalía describió como “presagios de desastre” mientras algunas de las víctimas sufrían. La fiscalía afirmó que Letby parecía emocionarse con el dolor y la desesperación que observaba en las habitaciones.
La relación de Letby con un médico
El fiscal también mencionó la relación secreta de Letby con un médico casado que trabajaba en el mismo hospital. Mensajes de texto con emoticones de corazones de amor y encuentros fuera del trabajo fueron presentados como pruebas de esta relación. La fiscalía alegó que Letby lastimaba a los bebés para atraer la atención personal del médico, pero la enfermera negó estas acusaciones.
En cuanto a las motivaciones detrás de sus actos, notas autoadhesivas encontradas en el bolso de Letby después de su arresto revelaron frases como “Los maté a propósito porque no soy lo suficientemente buena como para que me importen”, y “YO SOY MALA, YO HICE ESTO”. También expresó la tristeza de nunca tener una familia propia. Sin embargo, Letby afirmó que estas notas eran producto de su angustia mental y fueron escritas durante su suspensión del trabajo.
A pesar de estas revelaciones, las motivaciones exactas de Letby pueden nunca ser completamente comprendidas. El juicio arroja luz sobre la complejidad de su mente y las circunstancias que la llevaron a cometer estos terribles crímenes. La sentencia de Lucy Letby será un momento decisivo para la justicia y para aquellos afectados por sus acciones macabras.