Vuelos de aerolína de Sedena arrancarán en diciembre

Un juez desechó los recursos interpuestos por abogados de un grupo de trabajadores de Mexicana de Aviación, en contra de la posible compra de la marca por parte del gobierno.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dio a conocer que un juez desechó los recursos interpuestos por abogados de un grupo de trabajadores de Mexicana de Aviación, en contra de la posible compra de la marca por parte del gobierno.

El jefe del Ejecutivo señaló que la compra servirá para dar nombre a la nueva aerolínea, que estará a cargo de la Secretaría de la Defensa, y así está lucirá más; además, detalló que se tiene planeado que comience a volar a partir del 1 de diciembre de este año.

“Ya se resolvió (el recurso de los trabajadores), faltan otros trámites, pero estamos contentos y yo creo que también los trabajadores porque van a recibir un pago por la venta de esa marca y de esos bienes. Se hizo un avalúo y van a recibir alrededor de 1,000 millones de pesos, son 6,000 trabajadores y les va a tocar a algunos 60, a algunos 80, hasta 100,000 pesos”, indicó AMLO sobre la compra de la marca.

El jefe del ejecutivo señaló que esto será una recompensa para los trabajadores que han sufrido y padecido desde que Vicente Fox tomó la decisión de vender dicha marca y tendrá una “pequeña porción de lo que por justicia les corresponde”.

También, explicó que si no se hubiera llegado a un acuerdo para adquirir Mexicana de Aviación, ya se había planteado la posibilidad de utilizar otro nombre, como Línea Maya, aunque aseguró que el acuerdo se logró a finales de la semana pasada.

“Hay que hacer algunos otros trámites en algunos juzgados y yo espero que aquí les entreguemos el cheque a los trabajadores… de manera simbólica a todos. Van a hacer cheques personalizados, pero van a poder venir algunos a entregarles su pago por la marca”, dijo el presidente.

Hace unos días, durante la conferencia de prensa matutina, el mandatario había expresado su preocupación por la intervención de abogados que representaban a un grupo reducido de trabajadores de la aerolínea y que habían obstaculizado los esfuerzos de comprar la marca. Indicó, en ese momento, que la marca quedaría en litigio y que el gobierno no desea adquirir un conflicto legal.

“La marca (Mexicana de Aviación) quedaría en litigio y no queremos adquirir algo, comprar un pleito… Y quisimos, les hice un llamado a los abogados y a los trabajadores, y no. Entonces ya nada más estamos esperando”, comentó el presidente de México en aquel momento.