Alan Estrada ya había señalado en sus videos los problemas que un submarino de OceanGate había presentado durante su viaje a los restos del Titanic el año pasado.
En las últimas horas, la desaparición del submarino Titán ha acaparado la atención, no solo por ser propiedad de la empresa que ofrece excursiones hasta el lugar donde yacen los restos del Titanic, sino porque en su interior viajaban cinco personas. Esta experiencia y un vehículo similar fue el que, hace un año, abordó el actor y youtuber Alan Estrada.
Alan tuvo una primera oportunidad de bajar al naufragio en julio de 2021, pero diversos problemas técnicos impidieron la inmersión del sumergible experimental, por lo que fue hasta el pasado 2022 que pudo volver a intentarlo, sin embargo, también en este trayecto presentó varios problemas, entre ellos los de comunicación.
“Después de los mil metros, Scott (el piloto) detecta una falla en la comunicación, es vital que pudiéramos comunicarnos con la superficie, pues de otra manera podemos perdernos y quedar a la deriva en el medio del océano”, narró Alan durante su video realizado en el año 2022.
“El tiempo pasa, y a pesar de los intentos, los sistemas de comunicación no responden. A los 2 mil metros de profundidad hemos arrevesado el tiempo límite que el protocolo indica que podemos mantenernos sin comunicación, debido a esto es necesario abortar el descenso y regresar a la superficie”.
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Afortunadamente y tras varios intentos por parte de los expertos de OceanGate, se logra restablecer la comunicación, por lo que continuaron con el descenso hasta los restos del Titanic.
Una vez ya en los 3,800 metros, se logra observar como las luces del submarino comenzaban a fallar, parpadeando constantemente, sin embargo, el viaje se pudo realizar sin otro percance alguno.
Durante su experiencia el vehículo tardó cuatro horas tan sólo en salir de la plataforma e iniciar la inmersión y otras dos en bajar, una hora y media en encontrar los restos del Titanic, otra hora y media recorriendo la proa, o dos horas y media en regresar a la superficie y que el sumergible fuera recuperado.
Con información de El Siglo de Torreón
