Estados Unidos.- Lashawn Thompson, un hombre que se encontraba preso en una cárcel del condado de Fulton, Atlanta, Estados Unidos, murió en su celda devorado por chinches, debido a las condiciones deplorables en que se encontraba el lugar.
Thompson fue arrestado el 12 de junio por un delito menor y fue ingresado en la cárcel, dijo el abogado Michael Harper durante una conferencia de prensa el jueves que se transmitió en línea.
El personal de la cárcel lo colocó en el ala psiquiátrica después de determinar que tenía “problemas de salud mental”, dijo Harper, y agregó que a Thompson le habían diagnosticado esquizofrenia.
Tres meses después, Thompson murió en su celda, aunque los médicos intentaron reanimarlo, el hombre ya no contaba con signos vitales; por lo que se procedió a su autopsia para conocer las causas de muerte.¡
Según los reportes, uno de los trabajadores de la prisión tuvo que entrar con un traje un traje de seguridad diseñado para proteger de materiales peligrosos, fue cuando la ingresar encontró al hombre tirado en el suelo ya sin vida.
En la autopsia los médicos hallaron que había una infestación de pequeños insectos en el cuerpo de Thompson, las cuales podrían ser chinches debido a su tamaño.
De hecho, los médicos precisaron que la cara y extremidades superiores e inferiores del hombre presentaban cortes y lesiones provocadas por el picaje repetido de las chinches.
Cabe señalar, que luego de la muerte Lashawn Thompson, se tomaron medidas inmediatas como resultado de la investigación, incluido el gasto de $500,000 para abordar la infestación de “chinches, piojos y otras alimañas”.
También, se hicieron operaciones de limpieza para combatir enfermedades transmisibles y actualizar los protocolos para las rondas de seguridad para incluir el abordaje de las condiciones sanitarias, según a la declaración, informó The Associated Press.
Con información de Debate
