El nombramiento que hizo la gobernadora Maru Campos del nuevo titular de Vinculación Ciudadana de Gobierno del Estado, extrañó a propios y extraños, pues si bien Rafael Loera, estaba siendo perfilado para encabezar la presidencia del Comité Directivo Municipal del PAN, resultó que lo prefirieron para el gabinete estatal.
La maniobra obedece posiblemente, a que Rafa Loera, tiene que tener un puesto importante entre los panistas, pero las gestiones del grupo político “Los Gaudinis”, hizo todo lo posible para que no movieran -por ahora- a Paco Navarro de la dirigencia municipal del partido.
Esto cae como anillo al dedo a la gente de Atención Ciudadana, de donde sacaron a empujones a María Eugenia Baeza, es decir, ante un nombramiento no fortalecido, tuvo que existir una figura blanquiazul de respeto para que nadie hiciera de la dependencia un lugar acéfalo y caótico.
Esperemos que el susodicho dé el ancho, porque de lo contrario, a mitad de año se van a ver en serios problemas, pues es un canal directo con la ciudadanía, que al final de cuentas es lo que se refleja en votos para el próximo proceso electoral.
Anteriormente le habíamos platicado en esta columna, que el fiscal General del Estado, Roberto Fierro Duarte, se estaba haciendo pato con toda la información de los casos que han golpeado la tranquilidad de los chihuahuenses, sobre todo de las mujeres.
Pues ahora se escuchó en los pasillos de Palacio de Gobierno, que la orden directa vino desde arriba, y es que a decir del despacho de la gobernadora Maru Campos, las declaraciones del fiscal Fierro Duarte, estaban haciendo muchas olas y generando ruido en donde quieren mantener el agua calmada.
No nos extraña que al fiscal le hayan jalado las orejas para que dejara de dar declaraciones a diestra y siniestra, -y algunas muy pendejas-, sin siquiera consultar a la mandataria, pues es justo ella, quien debe dar los anuncios importantes y las buenas noticias…que no la opaque sin necesidad.
El secretario General de Gobierno, César Jáuregui Moreno, no se da abasto con la chamba, y aunque su jale era estar supervisando y coordinando la reunión de gabinete, en donde se iban a afinar los últimos detalles de la presentación del Plan Estatal de Desarrollo 2022 – 2027, fue solicitado en otro lugar.
Y es que, Jáuregui Moreno, tuvo que ir a hacer labor de cabildeo -lo que le apasiona-, en la torre legislativa, hasta donde fue a reunirse con los diputados, aprovechando el inicio del próximo periodo de sesiones, en donde se tendrán que aprobar varias iniciativas enviadas por el Ejecutivo.
El sectario busca a toda costa que los diputados de Morena, sobre todo, los renegados como Oscar Castrejón, Benjamín Carrera y María Antonieta Pérez, puedan ser empáticos con los proyectos de reforma de ley que promueve Maru Campos y compañía.
Esto va en el sentido de las modificaciones que se puedan hacer respecto a la digitalización de las dependencias y del Sistema Estatal Anticorrupción, el cual, aunque está bien pensado, ha dejado mucho qué desear, pues en teoría suena muy bien pero en la aplicación les falla bastante.
César Jáuregui, fue a pedir el apoyo de los legisladores de las cuatro representaciones de diputados para que los respalden en ese tema, sin embargo, lo único que le pidieron, fue que no sean las empresas ligadas a reconocidos panistas las que se avienten en jale, pues si bien, la modernidad es necesaria, no es justo que sean sólo ellos quienes se llenen los bolsillos de dinero -como siempre-, con semejantes contratos millonarios de digitalización.
