Israel.- “Las personas fueron promovidas por su cercanía, [y] actuaron de manera vengativa contra los miembros de la organización y explotaban su poder de muchas maneras“, según el informe sobre la UNRWA.
Un informe del departamento de ética del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas (UNRWA, por sus siglas en inglés) reveló una falta de conducta grave y corrupción en la agencia que trata con los refugiados palestinos en todo Medio Oriente, Cisjordania y Jerusalén.
El informe, preparado por el departamento de ética de la agencia y publicado por Al Jazeera, apunta hacia el comisionado general de la agencia, Pierre Krahenbuhl, como el foco de la corrupción, y lo acusa de centralizar la administración, explotando su poder para promover asociados y descuidando su papel en pro de extensos viajes alrededor del mundo. El informe se transfirió al Departamento de Auditoría Interna de la ONU, donde se negaron a comentar sobre la investigación dado que aún no se ha completado.
El informe afirma que Krahenbuhl y su círculo cercano actuaron “de manera inapropiada“.
“Las personas fueron promovidas por su cercanía, [y] actuaron de manera vengativa contra los miembros de la organización y explotaron su poder de muchas maneras” a partir de 2015, un año después de que Krahenbuhl fuera nombrado, según el informe. La crisis económica en la organización después del cese de la ayuda estadounidense también se usó como excusa para centralizar el poder en manos del comisionado general y de quienes lo rodean. El informe menciona que, debido a este comportamiento, se desarrolló un ambiente de baja moral en la organización, junto con temores de venganza, intimidación y secretismo que llevaron al colapso de la administración regular de la UNRWA.
A pesar del cese de la ayuda de EE.UU., Krahenbuhl realizó muchos viajes a estados del Golfo donde disfrutó de muchos meses de viajes de negocios. La asesora principal de la comisionada general, Maria Mohammadi, viajó junto con el comisionado general y, según el informe, su relación era algo más que profesional.
Krahenbuhl respondió al informe de Al Jazeera y afirmó que “si la investigación de la ONU encuentra espacio para correcciones en la organización, no dudaré en ejecutarlas, aunque todas las reclamaciones de que yo o la administración de la organización no nos relacionamos con nuestros roles con la seriedad que se exige es infundada y errónea. Nos corresponde a nosotros examinar los resultados del informe cuando se publique, y no confiar en los rumores. Las acusaciones son falsas y fabricadas“.
Fuente: ©EnlaceJudío
