*”Se la rayan” a Corral *Controversia en presentación del jersey de Bravos *Desafío a la prohibición

La casa en Ciudad Juárez del exgobernador Javier Corra, fue vandalizada con una tremenda pinta que textualmente dice “Corral Rata Robaviejitas”.

Aunque algunos se preguntarán el motivo o mensaje entre líneas de esa acusación, el hecho es que el señalamiento no está muy alejado de la realidad, y es que, Javier Corral utilizando el poder del que gozaba anteriormente, despojó a una adulta mayor de toda una casa.

Es justo a un costado de la casa de Javier Corral que fue rayada con un aerosol, en donde Corral Jurado usando artimañas y tráfico de influencias, se apoderó del predio, desalojando abusivamente a la adulta mayor.

Fue así como el flojo exgobernador, pudo ampliar su millonaria casa, sin que la justicia haya podido hacer su chamba y regresarle a la señora exvecina de Corral, lo que le pertenece legalmente.

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El pasado viernes en el museo de La Rodadora en Ciudad Juárez, Alejandra de la Vega encabezó un emotivo evento para presentar el jersey de los Bravos, conmemorativo a las extintas Cobras de Juárez.

Entre directivos de las empresas de De la Vega, exfutbolistas profesionales, miembros de la prensa y aficionados al equipo, se realizó la emotiva presentación en donde se recordaron viejos momento del fútbol juarense, y claro, cuando se habló de don Federico de la Vega, Alejandra tuvo que limpiar algunas lágrimas.

Lo que algunos reprobaron, fue la presencia de Manuel del Castillo, quien recientemente fue vocero de Javier Corral -en la peor parte del quinquenio-, luego fue vocero de Juan Carlos Loera -previo al presunto fraude millonario de becas para adultos mayores- y como vulgar traidor que es, ahora de rodillas ante Morena y las mentiras de la 4T.

En el evento, mientras se saludaba a personajes como Wama Núñez, Mario Leal o César Sosa, los aplausos no se hicieron esperar, pero cuando se mencionó Manuel del Castillo quien en la época de Cobras era un cronista deportivo, los presentes guardaron silencio y sólo se escucharon murmullos, seguramente nada agradables…

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Pese a las advertencias, Julión Álvarez y Alfredo Olivas se mofaron del alcalde Marco Bonilla y las autoridades locales, al burlarse de la prohibición para cantar narcocorridos.

Claro, con multas de un millón de pesos, los artistas y organizadores que se embolsan 10 veces eso, se burlan y se jactan de tener cómo y con qué pagar eso y más, mientras que las autoridades municipales, se quedan viendo cómo es que les avientan los corridazos en la cara.

Esto pasó en el concierto Prófugos del Anexo, en donde no sólo cantaron algunos corridos delictivos, sino que hasta detuvieron una canción para burlarse de Chihuahua haciendo comentarios alusivos a la prohibición, así como siendo sarcásticos sobre el respeto que merecen las autoridades.

Por si fuera poco, en ese concierto celebrado en el estadio universitario, dicen que fue descarado el consumo de drogas, pues comentan que por todos lados había gente consumiendo cocaína así como en elevados estados de ebriedad, esto sin que nadie hiciera nada para hacer valer la ley.

Y cómo iban a hacer algo los encargados de la seguridad, si contrataron a puro guardia inexperto, ya que los reclutaron dos días antes del evento por medio de publicaciones en Facebook

Se ha convertido en un deporte que los cantantes de narcocorridos que vengan a burlarse de Chihuahua, mientras Marco Bonilla, Pedro Oliva o las autoridades en turno, voltean para otro lado y estiran la mano para recibir el pago de las multas, que en realidad son sólo las migajas de esos eventos, en donde hasta los organizadores sacan el doble con la reventa de boletos, pues dicen que apropósito ponen lenta la página donde se compran las entradas, y cuando por fin los usuarios pueden entrar, “misteriosamente” ya se vendieron todos los boletos. Es cuando comienza la reventa y el verdadero negocio…