Ahora que están planchadas las candidaturas por el Senado de la República, la negocia de Adán Augusto López con Claudia Sheinbaum se dejó ver en Chihuahua, y es que, Adán Augusto logró que la dupla de Morena sea conformada por sus dos impulsores más grandes.
Aunque su operadora de campaña, Andrea, y el “buen visto” por López Obrador, Loera, andan muy contentos por haberse robado las candidaturas -así lo dicen morenistas agraviados-, son otros los que se lamen los bigotes. Destaca Marcelino Gómez y Ariel Fernández, quienes ahora se visualizan con alguna candidatura menor o hasta alguna pluri.
Por cierto, los verdaderos morenistas siguen furiosos por los acuerdos que cada proceso electoral, toman sus líderes, dejándolos sin espacios y usando a los genuinos sólo para tocar puertas en las colonias, pero sin compartirles ninguna rebanada del pastel.
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Hablando de los candidateables, se dice que en cuanto se dio a conocer que Mario Vázquez sí podría ir por el PAN, de inmediato el equipo de Vázquez detectó cuentas de Facebook haciéndose pasar por él.
Aunque dicen los allegados que Mario Vázquez no hizo mucho caso al asunto, su equipo sí tuvo que avisar a sus conocidos, familiares y amigos, pues al parecer los perfiles falsos comenzaron a agregar a sus contactos de la cuenta real.
En un principio se pensó que era un caso de esos de fraudes y extorsiones, como los que se han hecho últimamente con cuentas falsas de Pepe Granillo, pero según su equipo, después de una investigación con algunos conectes, se trata de gente de Andrea Chávez quien está haciendo la “guerrita sucia”.
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El que se anda haciendo loco es el representante del Gobierno del Estado en la Comisión de Selección de los magistrados, es Andrés Pérez Howlett, quien le anda sacando a su chamba y es que, por lo visto, su cabildeo no ha servido para nada.
El priista llegó muy felón y aseguró que las negocias le iban a generar a la gobernadora puras ternas convenientes para las diferentes salas que están acéfalas.
Pues la cosa no le ha salido como quisiera, y al parecer la gobernadora ya está cuestionando la falta de resultados, y es que, han tenido más peso los amparos promovidos por algunos morenistas y que ni siquiera tienen una base sólida, que la chamba de Pérez Howlett.
A ver ahora que los prianistas pierdan el power en por lo menos cuatro de las siete salas pendientes, como se van a poner las cosas en la Secretaría General de Gobierno, en donde seguramente Santiago de la Peña va a tener que tomar cartas en el asunto.
