Corea del Sur.- En una audiencia realizada este lunes, los fiscales han presentado una solicitud de pena de muerte para Jung Yoo-jung, una joven de 23 años que enfrenta cargos por el asesinato de una tutora autónoma en la ciudad de Busan, en el sudeste de Corea del Sur.
El crimen, que ocurrió el 26 de mayo, involucró el asesinato, desmembramiento y posterior abandono del cuerpo de la víctima, a pesar de que no había ninguna conexión personal entre la víctima y la acusada.
Motivaciones y crueldad extremas en el crimen
Según los fiscales, Jung Yoo-jung habría cometido el asesinato “por curiosidad sobre el asesinato” luego de que pasara horas viendo programas sobre asesinos seriales, una motivación que desconcierta a la sociedad.
En la audiencia, los fiscales argumentaron que Jung mató a la víctima como medio para canalizar su propia ira y propagar el miedo, ya que, de acuerdo con su versión, cualquiera podría ser asesinado sin motivo alguno.
El grado de crueldad en el crimen es atroz, ya que se señala que la víctima, también en sus veinte años, fue apuñalada más de 110 veces con un arma que la acusada había preparado previamente.
La brutalidad y la falta de aparente motivo en este caso han conmocionado a la sociedad surcoreana y han generado un debate sobre la seguridad y la prevención de la violencia en el país.
