Afirma Mexicanos Primero que nuevos libros de la SEP excluyen a poblaciones vulnerables

Foto: El FInanciero

Los libros de texto de la Secretaría de Educación Pública (SEP) no atienden los retos educativos, contienen textos difíciles de comprender, ponen mucha presión en maestros –al dejarles toda la responsabilidad para implementar la Nueva Escuela Mexicana– y excluyen a poblaciones vulnerables, advirtió la organización Mexicanos Primero.

Después de haber realizado una revisión de los materiales, la entidad señaló que existen grandes vacíos que podrán afectar a los estudiantes.

“Textos complejos que no atienden las necesidades de cada estudiante; se deja la responsabilidad en las y los maestros de implementar un modelo educativo que pasa de impartir distintas materias a campos formativos, y del aprendizaje individual de cada estudiante a uno comunitario, además de contenidos que no contemplan la realidad que se vive en el sistema educativo”, expuso.

“Los libros no abordan los desafíos preexistentes relacionados con la inclusión, equidad, logros académicos y riesgo de deserción que niñas, niños y adolescentes enfrentaban, los cuales se intensificaron durante la pandemia y que continúan sin recibir atención, indicó.

“La ausencia de datos y comprensión sobre los niveles de aprendizaje y las áreas de mejora de los estudiantes sugiere que su rendimiento seguirá siendo inferior”, advirtió.

Para ejemplo, citó el caso del libro Proyectos comunitarios, en el que se pide al alumno redactar problemas de su comunidad, así como soluciones; es decir, se asume que un niño de seis años sabe leer y escribir, y que cuentan con un pensamiento abstracto.

Además, señaló que “la publicación oficial de los libros de texto gratuito por la Conaliteg omite aún –a la fecha de la publicación de este texto– la inclusión de libros destinados a preescolar, secundaria, educación indígena y educación especial; es decir, deja fuera a 12.2 millones de estudiantes. Esta omisión resulta en la exclusión de estos estudiantes, aumentando las barreras que enfrentan en su proceso de aprendizaje”.

En Un libro sin recetas, en las fases que abarcan todos los grados de primaria, se da cuenta de que los docentes tendrán toda la responsabilidad de aplicar la Nueva Escuela Mexicana, sin que hayan tenido capacitación para llevarlo a cabo.

Además, la organización Mexicanos Primero sostuvo que los libros de educación pública carecen de una ruta clara de aprendizaje que vaya de acuerdo con el desarrollo cognitivo de los estudiantes en el país.

El Financiero