Descubren gigantesca estructura bajo la superficie de la Luna

Durante miles de años, la Luna ha sido objeto de fascinación por su belleza y sucesivas transformaciones.

A pesar de que la humanidad ha pisado su superficie, el satélite natural aún esconde numerosos secretos y misterios por resolver.

Recientemente, un grupo de investigadores estadounidenses ha descubierto una estructura gigantesca e inesperada bajo la superficie lunar.

 

Se trata de una masa que pesa al menos 2.180 millones de kilogramos, mide más de 300 km de profundidad y 2.000 km de longitud. Esta estructura se encuentra bajo la cuenca del Polo Sur-Aitken, uno de los mayores cráteres del Sistema Solar.

Los científicos proponen varias hipótesis para explicar su origen. Según el autor principal de la investigación, Peter B. James, podría estar formada por metal procedente del núcleo de un asteroide o por óxidos procedentes de la cristalización de un océano de magma.

El descubrimiento se realizó gracias a la misión GRAIL de la NASA, que mide los cambios en el campo gravitatorio de la Luna. Los datos recogidos por GRAIL permiten estudiar la composición interna del satélite y descubrir anomalías como la estructura descubierta.

Aunque aún no se ha desvelado el misterio de esta gigantesca estructura, los investigadores creen que la cuenca del Polo Sur-Aitken ofrece pistas valiosas sobre la historia y la composición interna de la Luna.

La Luna revela uno de sus mayores secretos: una estructura gigantesca y misteriosa

La estructura gigantesca descubierta bajo la superficie de la Luna ha sido objeto de gran interés por parte de la comunidad científica.

Los investigadores se han planteado diversas teorías sobre su origen, y aunque aún no hay una respuesta definitiva, las explicaciones más plausibles apuntan a que se trata de restos del material que formó la Luna en sus primeros años de existencia.

Según Peter B. James, autor principal de la investigación, una de las teorías más viables es que la estructura está formada por metal del núcleo de un asteroide que chocó contra la Luna hace millones de años.

Los restos de ese material quedaron incrustados en el manto lunar, dando lugar a la masa inesperada que los científicos han descubierto recientemente.

Otra teoría que se baraja es que la estructura podría estar compuesta por óxidos procedentes de la cristalización de un antiguo océano de magma. Estos óxidos podrían haber sido arrastrados a la cuenca del Polo Sur-Aitken por procesos tectónicos.

La exploración del espacio y la investigación científica nos permiten descubrir nuevos secretos y comprender mejor el funcionamiento del cosmos. La Luna, nuestro satélite natural más cercano, sigue siendo un objeto de fascinación y asombro, y con cada descubrimiento estamos más cerca de desvelar sus misterios.

Este descubrimiento nos demuestra que aún nos quedan muchos secretos por descubrir sobre la Luna, y quién sabe qué otros misterios podríamos encontrar en el futuro. ¿Qué otros descubrimientos sorprendentes nos deparará la exploración del espacio.

Con información de Debate