Dos de los cuatro ciudadanos estadounidenses fueron asesinados, mientras que de los dos que sobrevivieron, uno está herido.
TAMAULIPAS.- Autoridades de México y Estados Unidos informaron este martes que los cuatro ciudadanos estadounidenses que viajaron a México la semana pasada lo hicieron debido a que uno de ellos se sometería a una cirugía plástica en el abdomen.
De acuerdo con la información proporcionada por el FBI el fin de semana, los cuatro hombres que viajaban en una camioneta blanca con placas de Carolina del Norte, quedaron atrapados en una balacera poco después de entrar a la ciudad de Matamoros, en Tamaulipas, y fueron secuestrados por hombres armados que los arrojaron a la parte trasera de una camioneta.
“Los cuatro estadounidenses fueron colocados en un vehículo y sacados de la escena por hombres armados”, dijo el FBI, quien ofrecía una recompensa de 50 mil dólares por las víctimas y los secuestradores.
“Es como un mal sueño”, dice familiar de víctima
Información de Sin Embargo señala que Zalandria Brown, de Florence, Carolina del Sur, y hermana mayor de Zindell Brown, una de las víctimas, detalló que tras enterarse de lo ocurrido ha estado en contacto con el FBI.
“Esto es como un mal sueño del que desearías poder despertar. Ver a un miembro de tu familia tirado en la parte trasera de un camión y arrastrado, es simplemente increíble”, declaró durante una entrevista telefónica.
De acuerdo con Zalandria, su hermano, que vive en Myrtle Beach, junto con dos amigos, acompañaron a un tercer amigo a realizarse una cirugía estética de abdomen a una clínica en México para dividirse en las tareas de manejo. Mencionó también que si bien los hombres estaban al tanto de los peligros que se viven en México, decidieron hacer el viaje, aunque su hermano expresó algunas dudas.
“Zindell seguía diciendo, ‘No deberíamos bajar’”, dijo Zalandria.
Sobrevivientes regresaron a Estados Unidos
Luego de que se informara el hallazgo de los cuatro estadounidenses secuestrados, dos de ellos regresaron a Estados Unidos junto con un convoy de ambulancias y camionetas escoltadas por militares mexicanos y personal de la Guardia Nacional que portaban ametralladoras calibre 50, informó AP.
Sobre esto, Irving Barrios, fiscal de Tamaulipas, confirmó que los dos hombres fueron entregados a las autoridades estadounidenses en el puente internacional a Bownsville, Texas, y posteriormente llevados a un hospital.
Hasta el momento se desconoce si los cuerpos de las otras dos víctimas fueron devueltos a Estados Unidos.
Con información de El Imparcial.
