El director de Seguridad Pública Municipal, Julio césar Salas, estrena su nombramiento al frente de esa corporación con el arresto de un reportero el cual sólo realizaba su trabajo al informar a los chihuahuenses sobre un fatal accidente vial que dejó a una mujer sin vida.
El suceso quedó grabado en las cámaras de diferentes medios y en donde se aprecia que Jorge Ibarra, reportero policíaco que trabaja para 3 medios de comunicación, en ningún momento pasa el cordón que colocaron los uniformados para delimitar el perímetro, sin embargo aún así fue esposado y subido a una patrulla de la DSPM. En otras ocasiones sí se ha brincado el cordón con permiso de algunos amigos policías que el reportero tiene, pero en esta ocasión no.
Previo al arresto algunos reporteros transmitían en vivo y claramente se observa como es que los policías municipales comienzan a retirarlos del lugar, con tono grosero y actitud prepotente exigen a los informadores que se crucen la calle, aún y cuando no había colocado cordón en esa área, también comienzan a arrearlos como si fueran ganado y los obligan a cruzar la avenida Sacramento entre todo el tráfico, arriesgando la vida de los comunicadores.
Con esta acción los chihuahuenses podemos ir viendo el trato que nos espera por parte de la Policía Municipal y de su nuevo director Julio César Salas.
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De inmediato surgieron los mensajes de apoyo al reportero; el presidente del Foro de Periodistas de Chihuahua, Ernesto Almanza, hizo un enérgico llamado al señor Salas para que instruya a sus agentes a que respeten el trabajo periodístico, también le exigió que liberara al compañero.
Pero el que hace bulla por todo y en esta ocasión no fue la excepción, fue el diputado Omar Bazán, quien emitió un documento oficial para exigir la inmediata liberación del comunicador.
Seguramente en la sesión del Congreso del Estado del próximo martes, Bazán Flores presentará alguna iniciativa o punto de acuerdo para exigir a Marco Bonilla que ponga orden en la Policía Municipal, comenzando desde su nuevo director, hasta los comandantes y los operativos.
Es importante recordar que no es la primera vez en lo que va del año que los polimunicipales arremeten contra la prensa, por lo que sí es necesario que vayan jalando orejas a los prepotentes y de pasadita que los obliguen a leer el reglamento y los protocolos que deben seguir durante el desempeño de su chamba.
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Dicen algunos policías que con la salida de Gilberto Loya y la llegada de Julio César Salas, se desató una ola de inconformidad y envidias al interior de la corporación, pues aunque a Gilberto Loya no lo querían, reconocen que por lo menos tenía una vaga idea de cómo dirigir a la Policía Municipal, caso contrario con Salas, a quien señalan como un buen elemento, experto en el campo pero incapaz en el escritorio.
Los agentes aseguran que la detención del reportero, puede ser intencional para echarle la prensa encima al nuevo director, pues a más de la mitad no les gustó la idea de que el nuevo jefe de todos, fuera alguien emanado de las propias filas.
Posiblemente tengan razón, porque los inconformes y los envidiosos, coinciden en que Julio César apenas recibió el nombramiento y comenzó con las vendettas personales y los favoritismos, sobre todo con sus amigos y quienes le han dado una que otra lustrada de zapatos.
Si no pone orden pronto, le van a estar calentando la silla y en algunos meses va a terminar por renunciar o ser renunciado por Marco Bonilla, quien también deberá ser muy cuidadoso con este tipo de situaciones que en definitiva a nadie le conviene.
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El fin de semana tomaron protesta los dos alcaldes de las ciudades más importantes del estado; Chihuahua y Ciudad Juárez.
De inmediato se pudo observar la magnitud de ambos eventos; por un lado Cruz Pérez Cuéllar con un evento en la Plaza de la Mexicanidad con más de la mitad de sillas vacías, un sonido deficiente que no se alcanzaba a escuchar hasta atrás y con unos motociclistas que hacían un ruido ensordecedor con el escape de sus motos.
Por otro lado; Marco Bonilla que se lució con el lugar -el Centro de Convenciones- invitó a los presentes con termos y detallitos muy personalizados, un venero muy bien organizado con personajes de la política de “alto nivel”, y con un lleno total.
Los dos dijeron lo que harán en sus gobiernos respectivamente, -lo mismo que en campaña-.
Lo que sí es que se espera que ambos le metan “todos los kilos” al trabajo en sus municipio porque los dos quieren reelegirse, y los dos quieren ser gobernadores, así que los beneficiados serán los ciudadanos, bien por eso…
