Impulsan impuesto global a los multimillonarios: un paso hacia la justicia fiscal

En el contexto de las reuniones anuales del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, celebradas recientemente en Washington, se ha planteado una iniciativa de impacto global: la creación de un impuesto dirigido a los multimillonarios del planeta. Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía, el exministro de Finanzas de Colombia, José Antonio Ocampo, y otros expertos internacionales respaldaron la propuesta impulsada por Brasil, pero su implementación requiere del apoyo de más gobiernos.

El Fin del Neoliberalismo y la Necesidad de Gravar a los Superricos

Joseph Stiglitz destacó que durante los últimos 40 años, el enfoque neoliberal promovió la reducción de impuestos bajo el argumento de que el crecimiento económico resultante beneficiaría a todos. Sin embargo, esto no ocurrió, y la desigualdad siguió aumentando. En respuesta, Stiglitz señaló la necesidad de gravar a los superricos para abordar problemas como la desigualdad, el cambio climático y la crisis global de salud. “Tenemos que gravar a los superricos”, afirmó Stiglitz.

Propuesta de Brasil y el Apoyo del FMI

Brasil propone que el G-20, en su próxima cumbre, respalde un acuerdo para gravar la riqueza de los más ricos del mundo. La directora del FMI, Kristalina Georgieva, ya había mostrado su apoyo para incrementar impuestos a los ricos y a las grandes empresas, mientras que Rodrigo Valdés, jefe del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, comentó que es difícil cobrar a los magnates debido a su movilidad y a la existencia de paraísos fiscales. Aun así, Valdés sugirió gravar herencias y aumentar los impuestos a las empresas.

Impuesto Global sobre la Riqueza y sus Implicaciones

Gabriel Zucman, integrante de la Comisión Independiente para la Reforma del Tributo Empresarial Internacional (ICRICT), propuso un impuesto global sobre la riqueza para las aproximadamente 3 mil personas que poseen al menos mil millones de dólares. Según Zucman, muchos multimillonarios tienen una tasa efectiva de tributación mucho más baja que otros grupos socioeconómicos. El experto estima que esta propuesta podría recaudar 250 mil millones de dólares adicionales en ingresos cada año.

El exministro de Finanzas de Colombia, José Antonio Ocampo, señaló que Colombia tiene una larga tradición de gravar no solo ingresos, sino también riqueza, pero las reformas neoliberales de los 80 anularon esos impuestos. Recientemente, Colombia ha vuelto a aplicar un impuesto sobre la riqueza como medida temporal, con la esperanza de que se convierta en algo permanente. Ocampo enfatizó que el impuesto global sobre los ricos no debería limitarse solo a los multimillonarios, sino a todos los individuos ricos.

Desafíos y Apoyo Internacional

La implementación de un impuesto global sobre la riqueza enfrenta desafíos, especialmente por la existencia de paraísos fiscales y la competencia entre países por atraer empresas mediante tasas fiscales más bajas. Sin embargo, las propuestas brasileñas buscan crear un acuerdo global para gravar la riqueza, asegurando que estos ingresos no se queden solo en los países más ricos. Brasil está cabildeando para lograr el apoyo necesario, pero los funcionarios brasileños admiten que aún falta el respaldo suficiente de otros países.

Zucman sugirió que no se necesita el consenso de todos los países para avanzar con un impuesto global sobre la riqueza. Recordó que 140 naciones apoyaron un impuesto mínimo de 15% a las empresas transnacionales en 2021, y aunque Estados Unidos no lo ha aprobado, 35 países ya están aplicando esta medida.

Conclusión

La propuesta de un impuesto global a los multimillonarios es un paso importante hacia la justicia fiscal y la reducción de la desigualdad. Aunque enfrenta desafíos, el respaldo de figuras como Stiglitz y Georgieva, junto con la determinación de países como Brasil, podría ser el impulso necesario para iniciar una reforma global que haga que los más ricos paguen su parte justa.