México.- En México y en muchos lugares del mundo, la vesícula a menudo es retirada en una colecistectomía, cirugía que puede depender de la evaluación médica.
¿Podrían los alimentos considerados ‘saludables’ desencadenar problemas en la vesícula, el hígado y el páncreas? Esta es una pregunta relevante, ya que la alimentación puede influir en la necesidad de este procedimiento quirúrgico.
¿Cómo Identificar la Inflamación de la Vesícula?
La colecistitis aguda, o dolor de vesícula, puede ser difícil de diagnosticar debido a su proximidad a otros órganos como el hígado y el páncreas.
Los síntomas incluyen dolor agudo y constante, irradiación hacia la espalda, heces de color arcilla, cambio en la coloración de la piel, náuseas, vómitos y fiebre. La bilis atrapada, generalmente debido a cálculos biliares, es la causa principal.
Alimentos ‘Saludables’ que Podrían Causar Problemas
Aunque se asocia comúnmente la inflamación con alimentos grasos y picantes, incluso opciones consideradas ‘saludables’ pueden afectar estos órganos.
Productos lácteos sin grasa y sin azúcar, vegetales crudos que no estén cocidos y frutos secos, a pesar de sus beneficios, pueden alterar las vías biliares, ejerciendo presión en la vesícula y el hígado.
La Fundación Española para la Nutrición señala que los frutos secos contienen el 50% de la grasa que necesita ser emulsionada por las sales biliares.
Tiempo de Recuperación y Advertencia
Según el Instituto Médico Mayo Clinic, la disminución de la inflamación de la vesícula generalmente toma de 2 a 3 días. A pesar de la recuperación, si se ha experimentado dolor de vesícula, es probable enfrentar episodios futuros que podrían llevar a la necesidad de una colecistectomía.
Ante cualquier síntoma, es esencial consultar a un médico antes de automedicarse, ya que la falta de tratamiento adecuado podría desencadenar complicaciones como pancreatitis o daño hepático.
Ignorar los síntomas no es una opción segura, ni siquiera con remedios caseros como el té de manzanilla.
Con información de Excélsior México