Ciudad de México.- Carlos Romero Deschamps, exsecretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, falleció a la edad de 79 años en su domicilio del Valle de México. Su muerte, presuntamente debido a un infarto al miocardio, sorprendió a muchos, ya que no se conocía que padeciera problemas graves de salud.
Romero Deschamps fue líder sindical durante 26 años, además de ocupar cargos en el Senado de la República y en la Cámara de Diputados. A lo largo de su carrera sindical, estuvo involucrado en escándalos notorios, incluido el caso “Pemexgate”, donde fue acusado de peculado electoral en 2000, aunque no se comprobó su culpabilidad.
Una vida marcada por el sindicato petrolero
Carlos Romero Deschamps, nacido en Tampico, Tamaulipas, en 1944, lideró el sindicato petrolero durante más de dos décadas y ocupó cargos legislativos en repetidas ocasiones. Su tiempo al frente del sindicato estuvo marcado por controversias, siendo el caso “Pemexgate” uno de los más destacados.
En 2000, se le acusó de participar en el desvío de mil 500 millones de pesos de Petróleos Mexicanos (Pemex) a la campaña del candidato presidencial del PRI, Francisco Labastida Ochoa. A pesar de las acusaciones de peculado electoral, no se demostró su culpabilidad y el caso se cerró en 2011, declarando prescrito el “Pemexgate” por falta de pruebas.
La sorpresiva partida de un líder sindical controvertido
El fallecimiento de Carlos Romero Deschamps se produjo de manera sorpresiva, ya que no se había informado de ninguna afección cardíaca o de salud grave previa. Su legado sindical estuvo marcado por su prolongado liderazgo y su participación en el ámbito político.
Aunque enfrentó acusaciones y controversias a lo largo de su carrera, su influencia en el sindicato petrolero y en la política mexicana lo convirtió en una figura destacada en el país. Su deceso ha generado reacciones diversas y pone fin a una era en el sindicalismo petrolero mexicano.
