El Banco de México incrementó la tasa en 50 puntos base y llevó al rédito a 6% con el voto a favor de la gobernadora Victoria Rodríguez Ceja y tres subgobernadores: Galia Borja, Irene Espinosa y Jonathan Heath.
El subgobernador Gerardo Esquivel también apoyó el incremento, pero solicitó un alza de 25 puntos base.
Con la decisión del cuerpo colegiado se completan dos incrementos consecutivos de medio punto porcentual cada uno, una trayectoria no vista desde diciembre de 2016 y febrero de 2017, cuando la inflación estaba presionada por la liberalización del precio de energéticos, el llamado gasolinazo.
En la primera decisión monetaria del año que además marca el estreno de la Gobernadora en la Junta de Gobierno, el rédito llegó a un nivel no visto desde abril de 2020.
El comunicado del anuncio de hoy muestra también los objetivos intermedios de inflación de la Junta de Gobierno. Así, estiman que la variación promedio del primer trimestre del Indice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) estará en 6.9%, una tasa que contrasta con el 6.7% previsto en el anuncio de diciembre.
A partir de ahí estiman que viene una trayectoria descendente, que llevará la fluctuación de los precios a 5.4% entre abril y junio, una tasa que también está arriba del 5.1% que proyectaron el mes pasado.
Dejaron sin cambio su pronóstico para la meta puntual de inflación, que según sus estimaciones se tocará hasta el tercer trimestre de 2023.
Con información de El Economista
