Luego de que Microsoft comprara Activision, Sony se desploma un 9 %

Fotografía tomada de El Imparcial

Pasada la primera hora de negociación ya acumulaban un desplome del 9,3 % .

TOKIO.-Horas después de que la multinacional tecnológica estadounidense Microsoft anunciara la compra de la empresa de videojuegos Activision Blizzard este miércoles, la japonesa Sony se desplomó más de un 9 % en la apertura de la bolsa de Tokio.

Una fuerte caída presentaron las acciones de Sony y tan solo pasada la primera hora de negociación ya acumulaban un desplome del 9,3 % y era la firma más negociada de los primeros compases de la sesión.

“Piensan que Microsoft hará que todos los juegos de Activision Blizzard sean exclusivos (de Xbox), perjudicando las ventas de PlayStation y ayudando a Microsoft a cerrar la brecha de ventas de ‘hardware’ de Sony”, indicó Serkan Toto, el consultor de la industria, al valorar el desplome bursátil en sus redes sociales.

De este modo reaccionaron los accionistas de la empresa japonesa ante la operación entre las dos compañías estadounidenses, en la que supone la mayor adquisición de Microsoft hasta la fecha y una apuesta contundente por el sector de los videojuegos, en la que Sony  es su competidor directo.

Activision es la propietaria de IP de importantes sagas

Activision es la propietaria de IP (propiedades intelectuales) de importantes sagas de videojuegos como “Call of Duty”, “World of Warcraft” y “Crash Bandicoot”, las cuales pasarán a manos de Microsoft.

Microsoft, que ya cuenta con una importante presencia en el mundo de los videojuegos con su consola Xbox y títulos como “Minecraft”, se convertirá en la tercera mayor empresa del sector en cuanto a facturación, sólo superada por la china Tencent y la propia Sony, líder actual de este sector del ocio digital.

Mientras que la histórica operación de Microsoft fue un impulso bursátil, para otras importantes compañías de videojuegos como la también estadounidense Electronic Arts o la francesa Ubisoft, Sony recibió la noticia como un jarro de agua fría por la amenaza que representa para su hegemonía actual.

Con información de El Imparcial.