Alfonso de Hoyos Zamora, trailero monclovense y Gerardo Iracheta murieron este viernes en la clínica 7 de Seguro Social, ambos a causa de una neumonía atipica, sin embargo no se notificó a sus familiares si fue positivo a la prueba del COVID-19 que les practicaron.
Desde hace algunos días, los monclovenses, presentaron síntomas como fiebre, tos, insuficiencia respiratoria y en casos muy distintos terminaron aislados en el tercer piso del Seguro Social en Monclova, donde lamentablemente perdieron la vida.
Hasta hace algunos días, la familia de Alfonso de Hoyos, había dado a conocer que el trailero ingresó a la clínica el pasado 16 de marzo por complicaciones de una insuficiencia renal, se mantuvo en la cama 319 del tercer piso asilado y entubado sin recibir visitas de su familia finalmente la situación pasó a ser una neumonía atipica que al día de ayer le arrebató la vida.
Mientras tanto Gerardo Iracheta, paciente diabético ingreso la semana en curso por una neumonía que le complicó la salud.
Sus familiares denunciaron a través de redes sociales que se les negó el ingreso para visitar al enfermo.
DAN EL ULTIMO ADIOS A LOS MONCLOVENSES
En actos simutáneos, los cuerpos de los Alfonso y Gerardo fueron ayer despedidos por sus familiares.
la familia Iracheta, vivió un momento muy privado, la velación si acaso perduró escasas horas, finalmente ordenó la cremación del cuerpo.
“No MMS dolor de huesos tozz ,si ya no los veo no olviden q los ameee ,aaaaaaa diiiiooooos, soy de los q odio tomarse foto con el suero , tomarsr foto en cama hospital tirado pero esta vez me está llevando el demonio necesito remedio s casero sean serios por favor !!![sic]”, publicó en su muro de Facebook Gerardo Iracheta el pasado 17 de marzo.
Alfonso, estuvo solo cinco horas en velación en la capilla 147 ubicada sobre el bulevar Harold R. Pape, ahí solo pudieron ingresar los familiares más allegados.
Finalmente sus compañeros traileros realizaron una caravana detrás de la carroza pues no se les permitió bajarse de las unidades, se dirigieron escoltando a la carroza a la colonia el Roble donde habitaba y al final al panteón municipal Sagrado Corazón, donde le dieron cristiana sepultura solo miembros de su familia.
Al exterior del campo santo comenzaron a activar sus claxons para despedir a quien siempre fue su amigo incondicional.
Con información de Vanguardia
