Encabeza Martínez Garrido ceremonia de destrucción de armas de fuego

Esta mañana el presidente municipal, David Martínez Garrido estuvo presente en la destrucción de armas adquiridas en marco de la Campaña de Canje de Armas de Fuego 2017, que se realizó en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el Centro Empresarial de Nuevo Casas Grandes Coparmex y el Fideicomiso para la Competitividad y Seguridad Ciudadana (Ficosec) este 2017.

Fue en las instalaciones de Coparmex ubicada en la Avenida 5 de Mayo y Libertad, que el alcalde acompañó al presidente de esta cámara empresarial, Álvaro Bustillos; al Teniente Coronel de Infantería y Segundo Comandante del 35 Batallón, Rubén Zúñiga y al presidente de Ficosec, Eugenio Zamora Polanco, en la ceremonia simbólica de la destrucción de las armas de fuego recolectadas.

Un total de 22 armas de fuego, 25 cargadores, una granada de gas lacrimógeno, 4 cilindros de municiones y 4 mil 710 cartuchos fueron entregados por ciudadanos durante la campaña de canje de armas de fuego, en la región que abarca del municipio de Janos, Nuevo Casas Grandes, Casas Grandes y Galeana.

Durante la campaña de canje de armas, personal militar y de las instituciones involucradas atendieron a los ciudadanos que de manera voluntaria acudieron a donar algún arma de fuego.

La directora de Coparmex, Lizeth Cassini durante la ceremonia dio a conocer el informe financiero, señalando que se este año se entregaron 117 mil 550 mil pesos; de los cuales 82 mil 800 fueron en Nuevo Casas Grandes, 21 mil 750 en el municipio de Casas Grandes, 9 mil 750 en Janos y 3 mil 300 en Galena; incentivo económico que se otorgó en vales de despensa.

A su vez el presidente de la cámara manifestó que el objetivo principal de dicha campaña, es el de eliminar posibles riesgos de accidentes por el mal uso de armas de fuego o cartuchos; así como el de fomentar la cultura de la legalidad en el registro de las armas ante la ley.

Finalmente se llevó a cabo la destrucción simbólica de las armas de fuego y los cartuchos, por parte de personal militar del 35 Batallón de infantería, las cuales fueron inspeccionadas y cortadas, dando certeza y confianza a la sociedad de que el armamento es destruido, perdiendo plenamente las características y peculiaridades para las que fueron creados