Estados Unidos.- El anuncio del nuevo líder de la Iglesia católica generó reacciones inmediatas en todo el mundo, incluida la del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump. Aunque el elegido para suceder a Francisco no formaba parte de sus opciones preferidas, Trump se pronunció públicamente con un tono conciliador y nacionalista tras confirmarse la elección de Robert Francis Prevost como nuevo pontífice bajo el nombre de León XIV.
Primer Papa estadounidense en la historia
Robert Francis Prevost, nacido en Chicago y nacionalizado peruano, fue elegido Papa en el segundo día del cónclave tras la muerte de Francisco el pasado 21 de abril. Con 69 años de edad y una trayectoria de más de cuatro décadas en Perú, su elección representa un hecho histórico, al convertirse en el primer ciudadano estadounidense en asumir el cargo de Sumo Pontífice.
La postura de Trump: del sarcasmo al reconocimiento
Durante los días previos al cónclave, Trump había manifestado su preferencia por los cardenales Raymond Leo Burke y Timothy Dolan. Incluso llegó a bromear sobre sí mismo como aspirante ideal al pontificado. Sin embargo, tras la fumata blanca, el exmandatario compartió un mensaje diplomático en su red social Truth Social:
“Enhorabuena al cardenal Robert Francis Prevost, que acaba de ser nombrado Papa. Es un gran honor saber que es el primer Papa estadounidense. Qué emoción y qué gran honor para nuestro país. Estoy deseando reunirme con el Papa León XIV. ¡Será un momento muy significativo!”
Un perfil que podría incomodar a sectores conservadores
Aunque Prevost no ha emitido comentarios personales sobre temas políticos, su actividad reciente en redes sociales ha despertado inquietudes en ciertos círculos afines a Trump. En semanas anteriores, el ahora Papa compartió artículos de medios católicos críticos con la política migratoria del expresidente y del actual vicepresidente JD Vance, en especial por su postura hacia personas migrantes y acuerdos bilaterales como el firmado con El Salvador.
Uno de los artículos compartidos hacía referencia a una crítica del obispo auxiliar de Washington, Evelio Menjívar, sobre la colaboración de Estados Unidos con el gobierno de Nayib Bukele para trasladar presos salvadoreños, sin procesos legales, a cárceles de máxima seguridad.
Un pontificado con implicaciones geopolíticas
La llegada de un Papa estadounidense al Vaticano ocurre en un momento de alta tensión política internacional, donde temas como la migración, el papel de la Iglesia en la vida pública y la ética global adquieren nueva relevancia. Aunque Prevost ha mostrado cautela en sus expresiones, su historial sugiere una visión social que podría diferir de la de líderes conservadores estadounidenses.
Por ahora, la expectativa se centra en el rumbo pastoral y político que León XIV marcará en los próximos meses. Su primera audiencia pública y sus posicionamientos ante temas clave darán mayor claridad sobre su papel como figura espiritual y líder de opinión global.
Con información de Mediotiempo
