Ciudad de México.— En una reciente entrevista, la actriz Imelda Tuñón abordó los temas personales y familiares que han surgido tras el fallecimiento de Julián Figueroa, especialmente en relación con su hijo José Julián y con Maribel Guardia, abuela del menor.
Tuñón compartió que, aunque existe la posibilidad de una reconciliación, las consecuencias emocionales del proceso vivido siguen presentes. “El daño está hecho y no solo aquí… No estuve con mi hijo durante 38 días. Se exhortó al público a ejercer odio hacia mí y mi familia, lo cual fue muy fuerte”, señaló al referirse al impacto mediático tras la muerte del cantante.
Respecto al futuro de su hijo, expresó apertura ante una eventual convivencia con Maribel Guardia, aunque enfatizó que aún enfrenta heridas profundas. “Es una herida que fue muy fuerte, algo complicado”, comentó.
Sobre la intención de Guardia de trasladar las cenizas de Julián Figueroa a un lugar más accesible, Tuñón valoró positivamente la propuesta: “Es una acción muy linda de su parte… Que mi hijo tenga acceso a eso y pueda ir a visitar a su papá me parece algo muy bonito”.
La actriz también informó que ha tomado medidas legales para asegurar el bienestar de su hijo en caso de una eventualidad, al redactar recientemente su testamento. “Acabo de hacerlo para designar personas con las que mi hijo podría quedarse y qué pasaría con mis cosas, es por prevención”, explicó.
Actualmente, José Julián se encuentra estable y adaptado a sus actividades. “Está contento, está en la escuela, haciendo deporte como siempre, y está feliz”, compartió Tuñón.
Estas declaraciones surgen en el contexto de un proceso legal iniciado a principios de año, en el cual ambas partes buscan establecer acuerdos sobre la custodia y bienestar del menor. Maribel Guardia ha manifestado su interés en obtener visitas mediante autorización judicial, aunque no ha hecho referencias directas a la denuncia interpuesta anteriormente.
