
Ciudad de México, 6 de marzo.– Un reciente estudio publicado en Nature Microbiology ha encontrado que el consumo habitual de café podría estimular el crecimiento de bacterias intestinales benéficas, entre ellas Lawsonibacter asaccharolyticus, lo que abre nuevas líneas de investigación sobre la relación entre la dieta y el microbioma.
Relación entre el café y el crecimiento bacteriano
Investigadores de diversas instituciones analizaron muestras de ADN fecal de más de 20,000 personas y compararon los datos con información de 211 cohortes adicionales, sumando un total de 54,198 participantes en Estados Unidos y el Reino Unido.
Los resultados mostraron que el café favorece la proliferación de diversas especies bacterianas, especialmente L. asaccharolyticus. Este efecto se observó tanto en consumidores de café regular como descafeinado, lo que indica que no está relacionado con la cafeína.
Para confirmar la relación, los investigadores realizaron pruebas en laboratorio y comprobaron que la bacteria se reproducía más rápido cuando se exponía al café.
Un microorganismo con potencial para la salud
Descubierta en 2018, L. asaccharolyticus aún es poco estudiada, pero se sabe que contribuye a la producción de butirato, un ácido graso que facilita la digestión y tiene propiedades antiinflamatorias.
El microbiólogo Peter Belenky, de la Universidad de Brown, señaló que, aunque la información sobre esta bacteria es limitada, podría considerarse un microorganismo beneficioso.
Además, los investigadores detectaron que su crecimiento está vinculado con el aumento de ácido quínico y hipurato, compuestos con efectos antioxidantes y asociados con una mayor diversidad de la microbiota intestinal.
Implicaciones y próximos estudios
El hallazgo podría contribuir a futuras investigaciones sobre nutrición personalizada y el desarrollo de nuevos probióticos. Los científicos ahora buscan determinar qué otros compuestos del café influyen en el microbioma y si L. asaccharolyticus podría tener aplicaciones en salud digestiva.
Mientras tanto, este estudio sugiere que el café, además de ser una bebida estimulante, podría desempeñar un papel clave en el equilibrio del microbioma intestinal.