Seúl/Kiev.– El conflicto en Ucrania sigue escalando, y ahora una nueva preocupación emerge con la llegada de tropas norcoreanas para apoyar a Rusia, un hecho que ha alarmado tanto a Ucrania como a Corea del Sur. Este martes, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y su homólogo surcoreano, Yoon Suk Yeol, sostuvieron una conversación en la que acordaron intensificar el intercambio de inteligencia y coordinar una estrategia ante la posible implicación directa de soldados norcoreanos en el frente de guerra.
Corea del Sur ha señalado que su servicio de inteligencia (NIS) confirmó que un contingente norcoreano ya se encuentra en tránsito hacia las zonas de combate en Ucrania, y que el número de soldados podría aumentar significativamente en los próximos meses. “Nos preocupa que la guerra en Ucrania esté adquiriendo una dimensión internacional más amplia, lo que plantea riesgos adicionales para la estabilidad regional”, comentó Zelenski.
El presidente surcoreano calificó esta colaboración como una “alianza militar ilegal”, subrayando que la transferencia de tecnología militar avanzada de Rusia a Corea del Norte podría comprometer la seguridad de su país. Por su parte, el NIS también ha advertido sobre una posible reanudación de las pruebas nucleares de Piongyang y el lanzamiento de misiles de largo alcance.
La inteligencia surcoreana ha detectado, además, posibles problemas de comunicación entre los soldados norcoreanos y el ejército ruso, lo cual podría complicar la coordinación en el terreno. Aun así, Corea del Norte parece decidida a mantener y expandir esta colaboración militar, como lo demuestra la reciente visita de la canciller norcoreana, Choe Son-hui, a Moscú para discutir detalles sobre el apoyo militar y posibles compensaciones.
Con la tensión en aumento, la comunidad internacional sigue de cerca esta cooperación que podría redibujar las alianzas geopolíticas y complicar los esfuerzos diplomáticos para reducir el conflicto.