Estados Unidos.- El impacto de la inteligencia artificial (IA) en el ámbito laboral ha generado preocupaciones crecientes sobre el posible desplazamiento de trabajadores humanos por la tecnología. En medio de este debate, destacados empresarios como Bill Gates y Mark Zuckerberg han dado su opinión sobre el tema, cuestionando si realmente la IA puede reemplazar a los empleados humanos en diversas áreas.
En una entrevista reciente para el podcast Morning Brew Daily, Mark Zuckerberg, director ejecutivo de Meta, abordó el asunto del uso de la inteligencia artificial en el entorno laboral y su efecto en el empleo humano. Aunque el CEO de Meta tiene una perspectiva optimista sobre el futuro de la IA, también reconoce que su adopción inevitablemente generará cambios significativos en los procesos y la automatización.
“Estas herramientas proporcionarán a más personas el potencial para hacer lo que les interesa”, comentó Zuckerberg, quien ve la IA como un catalizador para impulsar a la humanidad hacia logros más grandes. Sin embargo, señaló que es probable que algunas tareas sean automatizadas, lo que podría tener un impacto en ciertos trabajos, pero no necesariamente en todos.
Zuckerberg también señaló que los despidos masivos que se han dado en años recientes tienen más que ver con la pandemia y sus efectos, más que con la inteligencia artificial. Según el CEO, la pandemia provocó un crecimiento excesivo y reestructuraciones, lo que llevó a algunas empresas a recortar personal. En el caso de Meta, las recientes medidas de reestructuración y despidos no tuvieron que ver con la IA, sino con un intento de hacer la empresa “más eficiente”.
En cuanto a la amenaza de la IA para los trabajos humanos, Zuckerberg expresó su confianza en que el ingenio humano es “ilimitado o extremadamente alto” y que todavía no hemos alcanzado el máximo potencial. Esto sugiere que, a pesar de los cambios que la IA puede traer, aún hay mucho espacio para la creatividad y el trabajo humano.
En resumen, la inteligencia artificial trae consigo desafíos y transformaciones, pero no necesariamente significa el final del trabajo humano. Si bien algunos trabajos podrían ser reemplazados por la automatización, otros seguirán requiriendo el toque humano, lo que refuerza la idea de que la IA puede ser una herramienta poderosa para mejorar la productividad y la creatividad sin amenazar necesariamente el empleo.
