Bacteria oceánica podría ayudar a buscar vida extraterrestre

Sulfurimonas pluma pertenece a una familia de organismos que sólo se conocía de los respiraderos volcánicos de los fondos marinos de la Tierra.

Las aguas más profundas de los océanos de la Tierra nos pueden dar respuestas convincentes acerca de la probable vida fuera de nuestro planeta. Para clarificar lo anterior, te hablaremos sobre el hallazgo de una bacteria hecho por un grupo de científicos. Se trata de Sulfurimonas pluma, la cual pertenece a una familia de organismos que sólo se conocían de los respiraderos volcánicos de los fondos marinos de la Tierra.

Sulfurimonas pluma no tolera los altos niveles de oxígeno del agua en otros lugares. Los astrónomos afirman que es probable que el tipo de fuentes termales donde esta bacteria vive también exista en mundos oceánicos como Europa, la luna de Júpiter, y Encélado, el satélite de Saturno. Por lo tanto, el hallazgo de esta bacteria nos podría dar una idea de cómo serían otras formas similares de origen extraterrestre en esas lunas.

Massimiliano Molari, científico del Instituto Max Planck de Microbiología Marina de Alemania, y autor principal del último estudio, afirma que S. pluma ha experimentado cambios genéticos únicos que le permiten adaptarse y prosperar en varios entornos en los océanos de la Tierra.

Una bacteria apta para diversos entornos

La bacteria tiene la capacidad de obtener energía de muchas fuentes. Por ello es que se le puede encontrar cerca de respiraderos ricos en hidrógeno en el fondo marino, y también en plumas ricas en oxígeno a miles de kilómetros de distancia.

Algo que sorprendió a los científicos es que el organismo utiliza principalmente el hidrógeno para multiplicarse y crecer de forma ubicua, lo cual no se había observado nunca en este tipo de entorno, según Molari.

Cabe recordar que, de 2004 a 2017, la misión Cassini de la NASA estudió Saturno y sus lunas. En estas zonas encontró hidrógeno en los chorros que brotaban del polo sur de Encélado, lo cual sugiere una ventilación hidrotermal activa rica en hidrógeno en el fondo del océano de la luna, tal y como ocurre en la Tierra.

Estos respiraderos se forman cuando el agua de mar fría y abundante en oxígeno se filtra por las grietas y vuelve a salir cuando se mezcla con el magma subyacente, lo cual hace que emerja siseando debido al calor.

Estas altas temperaturas provocan reacciones químicas donde el oxígeno del agua se elimina. Después, el líquido vital regresa al océano con otros minerales que favorecen el desarrollo de microbios.

A continuación, ocurren dos hechos: el penacho caliente asciende cientos de metros desde el fondo marino hasta que se queda sin vapor. Después se propaga de manera horizontal por miles de kilómetros. En este proceso se oxigena, gracias a la mezcla con el agua de mar circundante, que es rica en oxígeno.

Europa y Encélado: claves para la búsqueda de vida extraterrestre

Según los expertos, gran parte del crecimiento microbiano se produce en la segunda etapa, que es la misma donde el equipo del estudio encontró S. pluma en muestras recogidas en los océanos Ártico y Antártico. El microbio puede sobrevivir en todas las partes de una pluma hidrotermal a través del océano global de la Tierra, según los resultados del último estudio.

Los astrónomos esperan que se produzca un proceso similar en los volcanes de los fondos marinos de Europa y Encélado, aunque todo depende de la atracción gravitatoria de los cuerpos y de cómo circulan sus aguas.

Por lo tanto, si bacterias como S. pluma existen en los océanos de estas lunas, los resultados de este estudio “podrían significar que la probabilidad de detectar pruebas de estos organismos […] es mayor de lo que se pensaba”, concluyen los expertos.

Con información de Muy Interesante