Los cambios que hizo César Jáuregui en la estructura de la Fiscalía General del Estado, sorprendieron a propios y extraños, sobre todo cuando nombró a Heliodoro Araiza Reyes como director general del Centro Estatal de Información Análisis y Estadística Criminal
Si bien, Heliodoro tiene una amplia experiencia en materia jurídica y de seguridad, a nadie se le olvida que es mano derecha de Marco Quezada, es decir, que anduvo sopiloteando sobre Morena acompañando a su amigo, sin contar cuando junto a Alejandro Domínguez -dirigente estatal del PRI- , quisieron meter al “bote” a Maru Campos por los supuestos moches que César D. J. le habría dado.
También llamó la atención, que cambiara a sus fiscales de distrito de la zona Occidente y Sur, a quienes decía que les confiaba hasta la espalda, de hecho, aseguró que son sólo cambios estratégicos y que ambos personajes continuarán en la FGE pero en otros cargos.
Lo que César Jáuregui dejó muy claro, es que los nombramientos vinieron por órdenes de la gobernadora, lo que significa que se lavó las manos, y que cualquier error puede atribuírsele a la jefa de jefas directamente.
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Por cierto, dentro del marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la gobernadora encabezó el evento en el Congreso del Estado, donde se reconoció a la Chihuahuense Destacada.
Durante su llegada a la torre legislativa, Maru Campos entró como si fuera un concierto, y con bombo y platillo felicitó a las mujeres presentes, y textualmente dijo “feliz día de la mujer”, a lo que sólo recibió un silencio incómodo, pues en éste día está mal visto que se felicite a la mujer…
El problema no fue la gobernadora, quien lo hizo con la mejor intención, pero sí deberían jalarle las orejas a sus asesores, quienes no le informaron que felicitar a las mujeres por el 8M, es una falta de respeto a la lucha que por décadas han librado, misma lucha que permitió que hoy, por primera vez en la historia, Chihuahua tenga una gobernadora.
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No se necesita ser un radical para entender que la violencia contra la mujer es un mal lamentable que es necesario erradicar.
Justo el martes pasado, un día antes del 8M, el Congreso del Estado aprobó aumentar las penas contra quienes ataquen a una mujer con ácido o sustancias corrosivas, de este modo, el uso de estas sustancias se toma como una agravante alcanzando hasta los 10 años de prisión.
Esto significa un gran avance en la materia, que pone a Chihuahua a la vanguardia en adelanto de la lucha contra la violencia de género.
El dato curioso de todo esto, es que esta iniciativa fue promovida hace meses por el entonces coordinador de los diputados del PAN y actual secretario de Obras Públicas en el Estado, Mario Vázquez…
