Jueces cívicos del Municipio de Chihuahua; pilares en la impartición de justicia administrativa

  • Son constantemente capacitados y valorados por expertos para garantizar la correcta realización de los procedimientos

El Modelo de Justicia Cívica del Gobierno Municipal de Chihuahua, fue evaluado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), para garantizar los derechos humanos y la más estricta implementación de la justicia administrativa, por parte de los juzgadores cívicos hacia aquellos hombres y mujeres que son detenidos por policías preventivos.

Con el modelo de Justicia Cívica se busca prevenir el escalamiento de la violencia y disminuir la reincidencia en faltas administrativas al solucionar de manera ágil, transparente y eficiente los conflictos comunitarios. También se ha logrado mejorar la convivencia ciudadana y la percepción del orden público al tiempo de promover la cultura de la legalidad.

A diferencia del método que se seguía anteriormente, la nueva figura del mediador comunitario brinda mejores resultados al involucrar a los protagonistas del conflicto para solucionar sus propios problemas, antes de que sea necesario llegar hasta el Ministerio Público o a las instancias judiciales.

Marco Cancino, consultor experto en materia de implementación de Justicia Cívica a nivel nacional y auspiciado en parte por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), fue quien tuvo la encomienda de revisar y evaluar las diferentes áreas de que se compone Justicia Cívica: Trabajo Social, Psicología, Juzgados Cívicos, Unidad Médica y Mediación, en las instalaciones de las comandancias norte y sur de la ciudad, donde se encuentran las salas de audiencias.

Liliana Armendáriz Granados, subdirectora de Justicia Cívica y Prevención de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, explicó que el auditor ha acudido de manera periódica a la institución para evaluar los procesos desde el año 2018, cuando fue implementado este nuevo modelo en la Capital, dentro del programa de seguimiento para la Prevención y Reducción de la violencia en los municipios del país.

“Para garantizar que todo se realice a cabalidad, se realizan análisis exhaustivos de las actividades que realizan los jueces cívicos y los mediadores, así como la participación de todos aquellos que intervienen en las audiencias de las y los detenidos, con el objetivo de mejorar y encontrar áreas de oportunidad”, explicó la funcionaria municipal.

Cancino refiere que dicho acompañamiento no es exclusivo de la capital chihuahuense, sino también de municipios como Cuauhtémoc, Delicias, Parral y Ciudad Juárez, donde ya se trabaja para llevar a cabo la consolidación del Modelo Homologado de Justicia Cívica, contribuyendo así a una cobertura territorial más amplia en la “punición” de las faltas administrativas.

Gracias a las bondades que ofrece el Modelo de Justicia Cívica, municipios como Morelia, Michoacán; General Escobedo, Nuevo León; y recientemente en la ciudad de Chihuahua, cuentan con él de manera consolidada y se siguen sumando cada vez más, en aras de lograr sociedades más pacíficas y armoniosas.

“Como en todo, es necesario ajustar ciertos detalles de la operación para poder lograr su consolidación, entre ellas la evaluación constante de los juzgadores cívicos y su desempeño en la práctica”, explicó el experto.

Para lograr lo anterior es imperante revisar el diseño y operación del tamizaje que se realiza a los infractores, una práctica elemental que evalúa el perfil psico-social de la persona, a fin de realizar la canalización y adecuado seguimiento que ayuden a evitar la reincidencia en la comisión de faltas o delitos.