Cuáles son los tres padecimientos de mujeres incluidos en la tabla de enfermedades del trabajo

En el mundo del trabajo, mujeres y personas que menstrúan han sido discriminadas y excluidas con consecuencias económicas, sociales y psicológicas, pero también en su salud. ¿Qué pasa cuando cuerpos femeninos irrumpen en un mundo hecho para el de los hombres? Entre muchas cosas, padecer enfermedades muy específicas que quedan invisibilizadas.

Hasta ahora, dentro de los riesgos laborales no se habían tomado en cuenta las afectaciones a las mujeres y personas menstruantes y gestantes por el uso de sustancias tóxicas. Sin embargo, la nueva tabla de enfermedades del trabajo incluirá la endometriosis, los abortos recurrentes y la infertilidad como padecimientos que pueden sufrir con motivo de su empleo.

“Es totalmente novedoso, un avance importantísimo para las mujeres y las personas que tienen órganos sexuales femeninos. Esa consideración revolucionará, quizá de manera idealista, cómo se nos ve en el medio laboral”, dice la laboralista Alix Trimmer.

La medicina ha abordado los padecimientos estándares a partir de la existencia del hombre, señala. Por eso “es de celebrar que quienes se encargan de hacer las leyes volteen a ver estos temas que han sido olvidados por razones sociales”. Invisibilizarlos sólo ha perpetuado un sistema de desigualdades en contra de las mujeres y las personas femeninas, agrega la especialista en Derecho del Trabajo.

El proyecto de reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT) para incluir la nueva tabla de enfermedades laborales será presentado al Congreso de la Unión por el presidente Andrés Manuel López Obrador una vez que la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer) lo avale.

“En la medida en la que las personas desempeñan su trabajo en condiciones adecuadas y no se compromete su salud ni su integridad física, se dignifica su ocupación”, agrega la iniciativa de 144 páginas. El documento destaca que las autoridades no habían renovado esta tabla, “inexplicablemente, a pesar de medio siglo de avances de la medicina y de la ciencia”.

En ese tiempo aumentó la presencia de las mujeres y personas femeninas en el mercado laboral. Nuestra participación laboral pasó de 38% en 2005 a 42% en 2022, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE). Pero ha sido a costa de denunciar los despidos por embarazo, el acoso sexual, los pagos injustos y otras discriminaciones más. Y luego de denunciarlas, impulsar cambios legales, como éste.

Por fin se visibiliza la endometriosis

La endometriosis es la presencia de tejido endometrial en la pelvis, fuera del útero, lo que causa severos dolores durante la menstruación que pueden ser incapacitantes. Es un trastorno “frecuente que afecta aproximadamente al 10% de las mujeres en edad fértil”, según el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pese a ello, pocas personas saben de él.

Éste es uno de las 88 nuevos padecimientos que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) propone incluir a la tabla de enfermedades laborales. La investigación fue encabezada por Cointa Lagunes Cruz, directora de Normalización de Seguridad y Salud Laborales de la dependencia, duró más de tres años en desarrollarse pero será la más completa de América Latina.

De nuevo, la abogada feminista, enfatiza la importancia de incluir esta condición de salud, pero hay otras más relacionadas con la menstruación que causan dolores incapacitantes, como el ovario poliquístico o la dismenorrea. Se han mantenido ocultas por el tabú de la menstruación, “es algo de lo que nadie se debe enterar, no debe comentarse”. Y precisamente “el que comience a ser considerada desde la medicina del trabajo es algo revolucionario”.

El proyecto señala como suceptibles de desarrollar endometriosis a quienes trabajan en “procesos industriales relacionados con el cloro”, como el blanqueo de pasta de papel o la fabricación de plaguicidas. También aquellas trabajan en:

Hornos de cementeras
Incineración de todo tipo de residuos
Industria del acero, fundiciones y plantas de sinterización
Producción de electricidad en centrales térmicas
Reciclaje de aluminio, cobre y zinc

Abortos recurrentes

Las personas que formulan y aplican medicamentos antineoplásicos, para el tratamiento de tumores, pueden padecer la pérdida recurrente de su embarazo. También quienes están expuestas al disulfuro de carbono, que se usa para fabricar rayón (un tipo de tela) y quienes producen y aplican barnices, pinturas o removedores de pintura.

El plomo ha sido una de las sustancias más conocidas por causar daños, pero hasta ahora se incorpora como un causante de aborto. Están expuestas a él quienes elaboran:

Albayalde, una pintura que se usa en las artes
Cerámica
Envolturas de cables
Esmaltes y lacas
Trabajar con material radioactivo, en refinerías de gasolina con plomo y en gasolinerías, también son factores de riesgo.

Infertilidad

La actualización de la tabla de enfermedades de trabajo incluye la “infertilidad femenina”. Aquí contempla a quines están expuestas a radiaciones ionizantes que laboran en:

Centrales nucleares
Minas radioactivas
Fabricación y uso de equipos de radioterapia y de rayos X
Las trabajadoras de las industrias colorantes, farmacéutica, química, textil y tintas tienen riesgo de desarrollar infertilidad. Así como quienes laboran en la refinación del petróleo.

El mercurio es otro elemento que evita a las mujeres poder embarazarse. Así que si trabajan en la extracción de oro, plata y mercurio, o son asistentes o secretarias de servicios médicos y odontológicos, también.

Ahora, ¿cómo se aplica esta tabla?

Para que una enfermedad sea determinada como laboral tiene que haber una relación directa con el trabajo, explica Alex Trimmer. “Se tiene que solicitar la intervención del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para la revisión del padecimiento y su posible clasificación como riesgo de trabajo o enfermedad laboral”.

“El problema es que muchas personas no inician este trámite por lo engorroso que resulta el trámite”, la burocracia de las instituciones gubernamentales puede desincentivar la acción.

“Pero una vez que se empieza, normalmente el resultado es favorable para las personas, generalmente se les da la razón”. Luego de eso, dependiendo de cuál sea el caso, se otorga una indemnización, incapacidad temporal o permanente, agrega.

“Si no presionamos desde nuestro lugar de gobernadas y gobernados, será difícil que la autoridad cambie esto. Si cada vez son más las personas que presentan estas solicitudes, estarán aportando para que la ley se cumpla”, expresa.

Con información de El Economista