El presidente López Obrador rechazó que sea obligatoria la medida de la carta compromiso
A menos de dos semanas del inicio del ciclo escolar 2021-2022, en las entidades aún hay incertidumbre sobre el regreso presencial a las aulas.
Los protocolos provocan dudas entre la comunidad escolar, padres de familia externan temor y parte del magisterio se opone a las clases presenciales, lo que ha generado que diversos estados se cuestionen sobre el retorno, mientras el Gobierno federal presiona por ello.
Luego de que la semana pasada, durante una reunión de la Secretaría de Educación Pública con gobernadores, se presentaran las directrices para el retorno seguro a las aulas, Nuevo León, Hidalgo y Michoacán se replantean la vuelta a las escuelas ante el incremento de los contagios.
En Nuevo León, a través de una reunión virtual de 889 representantes del sector educativo, vinculados con el gobernador Jaime Rodríguez Calderón, se votó en un 99 por ciento por que las clases presenciales no dieran inicio el 30 de agosto.
Situación similar fue la de Hidalgo, donde el ejecutivo estatal, Omar Fayad, alertó por el incremento de contagios en la entidad.
En ese estado se determinó de igual forma que el retorno a las aulas no se dará hasta que las condiciones sean las adecuadas.
Por su parte, el Gobierno de Michoacán aseguró que debido a las cifras de contagio no hay condiciones para la vuelta a escuelas.
Este fin de semana, la Secretaría de Educación estatal comunicó que el ciclo escolar empezaría de forma virtual.
A esta crisis se le suma el que el Gobierno michoacano alertó que no cuenta con presupuesto para pagar al sector educativo hasta el fin de la administración.
En Baja California Sur, Colima, Guerrero, Nayarit, San Luis Potosí, Tamaulipas, Oaxaca, Puebla y Quintana Roo las autoridades dudan sobre el regreso a las aulas, sin embargo, no hay pronunciamiento oficial.
Si bien el protocolo divulgado por Educación Pública incluye reforzar las medidas sanitarias, el lavado de manos y la implementación de espacios abiertos para evitar contagios, la mayoría de las escuelas de educación básica tiene carencias de infraestructura física educativa.
De acuerdo con el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), las localidades donde se ubican estas escuelas también son parte del problema, puesto que de la totalidad de las mismas el 45 por ciento carece de drenaje, 23 % no tiene red de agua potable y 3 % no tiene energía eléctrica.
A esto se sumó la carta compromiso solicitada por la SEP, la cual era de carácter obligatorio hasta ayer, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador desautorizó la medida, luego de que especialistas en educación subrayaran que el Gobierno debe corresponsabilizarse en proporcionar espacios seguros y aptos para las comunidades escolares.
Con información de El Siglo de Torreón.
