Coahuila.- La necropsia practicada al cuerpo de Alondra Elizabeth Gallegos García, de 20 años de edad, reveló que murió de asfixia por estrangulamiento.
José “N”, el cual era su amigo, se encuentra detenido por posesión de droga y confesó su crimen.
El cuerpo de la joven, quien dejó a una niña de cuatro años en la orfandad, fue velado y sepultado este domingo en el Panteón “La Paz”, de Saltillo, Coahuila.
Según las primeras pesquisas José, en unas horas más será imputado por feminicidio y otros delitos que le resulten, era el empleador de Gallegos García, ya que aseaba los cuartos de una vecindad que él renta a varias personas.
Con el dolor a cuestas por el atroz asesinato, sus padres, su hermano, demás familiares, amigas y amigos de Alondra y grupos de activistas, la mayoría vestidos con ropa color negro, se movilizaron este domingo por la tarde en la Plaza de Armas, de la capital del estado.
Montaron un altar con fotos de la muchacha donde colocaron flores, encendieron cientos de veladoras y en un tendedero colgaron cartulinas con sus demandas. También hubo quienes escribieron consignas en la fachada del Palacio de Gobierno.
Los guardias que resguardan el edificio, sede del Poder Ejecutivo, se mantuvieron a la expectativa sin arrestar a ninguno de los que dañaron la Cantera Rosa que cubre el inmueble.
El numeroso contingente de manifestantes, quienes usaban cubrebocas y trataban de mantener la sana distancia por la pandemia de Covid-19, portaron cartelones con leyendas de repudio a las autoridades.
Acusan a la Fiscalía General de Coahuila de omisión en las investigaciones para localizar a la joven.
Ella fue encontrada sin vida el 26 de septiembre por la tarde, en la vecindad donde laboraba, con huellas de tortura, cinco días después de que desapareció.
Ahí en la plaza ubicada en el Centro Histórico de Saltillo, frente a Palacio, alzaron la voz y demandaron justicia para la víctima.
Este horrible crimen ha causado indignación en la sociedad saltillense, del resto de la entidad e incluso ha trascendido las fronteras del mismo.
“#Justicia para Alondra, ni una asesinada más…”exigieron a gritos y citaron la “Canción Sin Miedo” de la lagunera Vivir Quintana, que se ha convertido en el Himno Feminista de las mujeres que luchan contra el machismo, a que no les peguen ni las maltraten, por el derecho a vivir sin miedo y a que no las maten.
Al unísono entonaban:
Cantamos sin miedo, pedimos justicia. Gritamos por cada desaparecida. Que resuene fuerte. ¡Nos queremos vivas…!”.
“Nos sembraron miedo, nos salieron alas…Que caiga con fuerza el feminicida. Si tocan a una respondemos todas…”, dice la melodía donde demandan poner un alto a la violencia de género.
En un comunicado a la opinión pública que leyó una mujer, reprocharon y acusaron negligencia de la Fiscalía porque, aseguran, la Policía Investigadora no actuó con prontitud y celeridad para dar con el paradero de Alondra.
Además reclamaron la renuncia de todos los funcionarios que incurrieron en omisiones en la búsqueda, hasta del Fiscal General del Estado, Gerardo Márquez Guevara y del Gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís.
Con información de El Imparcial
