Indonesia.- Un violador de niños en la ciudad de Banda Aceh, Indonesia, fue condenado a recibir 169 azotes luego de ser hallado culpable, pero colapsó cuando iban 52.
La pena se dictó en contra de Roni, quien debía ser golpeado con un bastón de miambre.
Los médicos dictaminaron que no estaba en condiciones de continuar, lo que significa que será golpeado por segunda vez, cuando reciba los 117 latigazos restantes, citó el periódico Milenio.
“Cuando lo azotaron 52 veces, encontramos grandes ampollas en la parte derecha de su espalda, por lo que de continuar los azotes se corría el riesgo de que los vasos sanguíneos pudieran estallar y provocar un sangrado”, confirmó un médico que atestiguó el castigo.
El acusado había cumplido seis meses de cárcel antes de que se realizaran los golpes, reduciendo su sentencia de 175 a 169 azotes, lo que significa un latigazo por cada mes en prisión.
Según el medio informativo, los azotes son utilizados para castigar una variedad de delitos en Banda Aceh, la provincia más conservadora de Indonesia, y la única que basa su sistema legal en la ley Sharia, que es la ley islámica.
Con información de El Imparcial
