Dile a mis hijos que los amo, estoy muerto: las últimas palabras de Floyd antes de morir

Estados Unidos.- Cuando estaba inmovilizado, boca abajo y con la rodilla de un oficial presionando su cuello durante más de ocho minutos, George Floyd suplicó hasta 20 veces que no podía respirar, de acuerdo con transcripciones de los videos que captaron las cámaras corporales de dos de los agentes de la policía de Minneapolis que participaron en la detención el pasado 25 de mayo en la que murió el afroamericano.

Las reproducciones de las cámaras usadas por los expolicías Thomas Lane y J. Alexander Kueng fueron archivadas en la corte estatal de Minessota como parte de una moción para intentar eliminar los cargos contra Lane de alentar y colaborar en el asesinato de Floyd, un hecho que provocó una oleada de protestas en todo Estados Unidos y otras partes del mundo contra la brutalidad policial, contó la NPR.

“No puedo creer esto, hombre. Mamá, te amo. Te amo. Dile a mis hijos que los amo. Estoy muerto”, dijo Floyd durante los casi nueve minutos que el oficial permaneció arrodillado sobre él mientras estaba a punto de morir.

Según la transcripción hecha pública el miércoles, Floyd suplicó a los agentes que no lo metieran en el vehículo policial porque era claustrofóbico y tenía problemas físicos.

“Se acabó. Tengo claustrofobia. Me duele el estómago. Me duele el cuello. Me duele todo. Necesito agua o algo, por favor. ¿Por favor? No puedo respirar, agente”, dijo. “Me vas a matar”, dijo la víctima.

Derek Chauvin, el policía que se arrodilló sobre Floyd, respondió: “Entonces deja de hablar, deja de gritar, se necesita muchísimo oxígeno para hablar“.

“I can’t breath”

Ese “no puedo respirar” (“I can’t breath”) de Floyd se convirtió después en uno de los lemas de las protestas.

Floyd también informó a los policías de que había estado enfermo de coronavirus y que le costaba respirar.

En un momento, Lane cuestionó a Chauvin -el agente con más experiencia de los cuatro- si debían girar a Floyd de lado, pero este respondió que “no”.

Lane insistió que estaba preocupado por el estado de salud de Floyd, ya que parecía estar bajo el efecto de alguna sustancia.

“Bueno, es por eso que viene una ambulancia”, dijo Chauvin, que no levantó la rodilla del cuello de Floyd hasta que un paramédico se lo indicó.

Chauvin, hombre blanco, fue arrestado el 29 de mayo, cuatro días después de la muerte de Floyd. Se declaró inocente de los cargos de asesinato en segundo grado y homicidio involuntario. Otros tres ex policías han sido acusados de ayudar e incitar en el caso.

En un momento, uno de esos oficiales, Thomas Lane, sugirió que Chauvin pusiera a Floyd de lado, según la transcripción. “No, se queda donde está”, respondió Chauvin.

Chauvin está acusado de asesinato en segundo grado y homicidio en tercer grado por matar a Floyd, mientras que sobre Lane, Thao y Kueng pesan cargos por ayudar e instigar al asesinato en segundo grado.

Lane, que está en libertad bajo fianza de 750.000 dólares, ha argumentado que era su primera semana de trabajo en el cuerpo y que fue Chauvin quien tomó las decisiones que llevaron a la muerte de Floyd.

El asesinato de Floyd provocó un enorme estallido de protestas y disturbios raciales a lo largo y ancho del país por las recurrentes muertes de ciudadanos afroamericanos a manos de policías en Estados Unidos.

Con información de El Mundo y El Español