ESTADOS UNIDOS.- Un prisionero de Michigan que se negó a recibir libertad condicional a principios de este año después de décadas tras las rejas murió por complicaciones de COVID-19, dijeron las autoridades.
William Garrison es uno de los 17 prisioneros de Michigan que han muerto por COVID-19, una enfermedad respiratoria causada por el coronavirus, dijo el Departamento de Correcciones.
Garrison, de 60 años, podría haber salido de prisión en libertad condicional hace semanas. Pero decidió esperar hasta septiembre, cuando sería elegible para una liberación completa sin los rigores de la supervisión de la libertad condicional, informó el sábado la Detroit Free Press.
Después de casi 44 años en prisión, “estaba tratando de liberarse”, dijo la hermana Yolanda Peterson.
Sin embargo, Garrison cambió su postura durante el brote de coronavirus, que ha infectado a más de 500 presos en las cárceles de Michigan. La junta de libertad condicional aprobó su solicitud en marzo. Garrison murió el lunes mientras esperaba para ver si los fiscales lo desafiarían, un paso estándar que puede llevar semanas.
Fue llevado a un hospital ese mismo día después de que otro prisionero en la Instalación Correccional de Macomb lo encontró sin aliento, dijo el portavoz Chris Gautz. Dijo que Garrison no se había quejado al personal sobre su salud.
Fue “desafortunado”, dijo Gautz, señalando que Garrison podría haber estado fuera hace semanas.
Garrison fue sentenciado a cadena perpetua por matar a un hombre durante un robo en 1976 cuando Garrison tenía 16 años. Su sentencia se redujo a 40 años en enero como resultado de las decisiones de la Corte Suprema de los Estados Unidos que hacen que los menores de edad sean elegibles para la liberación.
“Era un entusiasta defensor de sí mismo y de otras personas encarceladas. A menudo ayudó a otras personas con sus asuntos legales “, dijo la abogada Becky Hahn, quien ayudó a Garrison a obtener la sentencia reducida.
Con información de El Imparical
