El pasado 5 de Julio un oso “robó” un auto en el condado de Boulder, Colorado, Estados Unidos, domostrando así que la conducción no es una de las muchas habilidades de estos animales.
El “delincuente” como fue descrito por los policías locales, se hizo del automóvil luego de que lo encontrara con las puertas abiertas; una vez dentro, éstas se cerraron dejando atrapado al úrsido.
Mientras forcejeaba para librarse, activó la palanca de velocidades poniendo en neutral la marcha y esto generó que el coche se deslizara por unos 30 metros colina abajo hasta que terminó estrellándose con un árbol, narra la oficina del Sheriff a través de su cuenta en facebook.
El “ladrón” resultó ileso, no obstante el automóvil terminó con daños al interior y exterior.
Con información de Excélsior.
