La Fiscalía General del Estado de Chihuahua ocupó el primer lugar del desempeño de las procuradurías generales y fiscalías a nivel nacional, con una calificación a su trabajo del 83.12 por ciento, de acuerdo a un reporte de Impunidad|Cero.
Este organismo ciudadano que aborda la importancia de generar conciencia en quienes pueden ser o son víctimas de impunidad incluso sin saberlo, presentó este mes de noviembre y en colaboración con Jurimetría, un ranking de desempeño nacional de las fiscalías y procuradurías estatales.
De acuerdo a esa investigación conjunta, se estudiaron distintas variables de gasto en procuración de justicia, en porcentaje de denuncia, de resolución de los casos y capacidad investigativa, para poder ordenar a las entidades del país según la calidad de su sistema de impartición de justicia.
Con esos parámetros se determinó conceder el primer lugar a Chihuahua y le siguieron después: Nayarit, con el 68.33 por ciento de desempeño; Guanajuato, con el 62.08; Nuevo León, 61.61 y Yucatán, con el 59.79 por ciento.
“Estados como Chihuahua, Nuevo León, Guanajuato y Baja California comienzan a cosechar los resultados de la profesionalización y de modelos de gestión más eficientes”, expresa el organismo a través de un comunicado difundido a través de su página http://www.impunidadcero.org .
En esta investigación uno de sus colaboradores, el doctor Guillermo Zepeda Lecuona estudia el funcionamiento y efectividad de los Ministerios Públicos.
Para este investigador, las insuficiencias e ineficiencias de la investigación criminal son el corazón de la impunidad penal en México. La investigación arroja que no se está cumpliendo la promesa del sistema acusatorio: se está descongestionando el sistema, pero no se reduce la impunidad en delitos de mayor impacto.
A partir de ahí, destacan los siguientes datos:
La efectividad de la investigación (determinar si hay o no delito que perseguir y hay un probable responsable u otra forma de resolución) es de 14.1% en México (10.2% en el sistema tradicional y 18.1% en el sistema acusatorio).
La capacidad de investigación criminal en México se ha deteriorado, hace 15 años se resolvía 23% de los casos; hoy solo 14%.
Solo en nueve de cada 20 órdenes de aprehensión giradas por los jueces locales, se logra la detención del probable responsable.
Un dato inquietante es que en el sistema acusatorio 1 de cada 3 casos en los que se determina que no hay delito que perseguir, se hace sin haber desahogado una investigación (uso de facultad de no investigar).
No obstante, la capacitación y certificación de los facilitadores y la metodología y técnicas de mediación y conciliación agregan un aspecto cualitativo fundamental a favor del nuevo sistema, concluye la investigación.
