Luego de la histórica demostración del 16 de julio, cuando millones de venezolanos acudieron a expresar su rechazo a la Constituyente convocada por Maduro para el 30 de este mismo mes, el país parece encaminarse hacia una confrontación definitiva. El gobierno no sólo no da la más mínima muestra de retirar la convocatoria a la Constituyente espúrea, sino que arrecia la represión.
El día 20 de julio se produjeron en el país varias muertes en un solo día, acompañadas de decenas de heridos y cientos de detenciones. Vicente Fox, expresidente de México declarado persona no grata por el gobierno venezolano, repicó las campanas a los líderes de la región: “No nos hagamos de la vista gorda. Venezuela necesita de todos. Pongamos un alto al régimen antes de que se propague”.
La Asamblea Nacional, por su parte, ha cumplido el mandato de renovar los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), nombrados ilegalmente en diciembre del 2015 y se propone, igualmente, sustituir a los rectores del Consejo Nacional Electoral además de anunciar la integración de un equipo de gobierno de transición. Para todo ello tiene facultades, pero el resultado es inequívoco: habrá dos gobiernos en el país, uno apegado a la Constitución y el otro sin respaldo del país, aferrado al poder con el apoyo de la cúpula militar.
Un hecho sin precedentes se produjo luego de juramentados los nuevos magistrados del TSJ: hace pocas horas, funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) se llevaron detenido a uno de ellos, el profesor de la Universidad Católica Andrés Bello Angel Zerpa Aponte, respetado hombre de leyes de trayectoria intachable. Como ha ocurrido en anteriores ocasiones, esta acción arbitraria del régimen parece destinada al amedrentamiento de los restantes nuevos magistrados.
El arzobispo de Ciudad Bolívar, monseñor Ulises Gutiérrez, colocó en su cuenta de Twitter: “Más allá de la ambición política, el desastre que impera en Venezuela podemos afirmar que es satánico”.
Otra figura emblemática del episcopado, monseñor Ovidio Pérez Morales, activo tuitero, formuló directos llamados a los militares: “Los militares se forman para obedecer. Pero recuerden lo que dice la Biblia (Hechos 4,19): es preciso obedecer a Dios antes que a los hombres”.
El Foro Penal, que moviliza más de 3.000 activistas, dedicados a velar por los Derechos Humanos y la defensa de las víctimas de la represión, animó al país a cerrar filas en la lucha y dejó claro que no aceptará ninguna negociación con el Gobierno que deje fuera la liberación de los presos políticos. El escollo, para Maduro, es que pretende negociar con una fuerza, una influencia y unos éxitos que no tiene.
La temperatura social y política aumenta en el país en tanto que el gobierno de Maduro se blinda militarizando las policías.
Voceros conspicuos del régimen, como el gobernador de Barinas, señalado por sus conexiones con toda clase de grupos irregulares, amenazó: “Por lo votos o por las armas, pero ganaremos”.
Pero Cilia Flores, esposa de Maduro y ahora candidata a la Constituyente, dejó caer esta frase en un acto público transmitido a través del señal del canal de Estado: “Él -Maduro- está haciendo de tripas corazones. No podemos dejar solo a nuestro presidente. ¿Ustedes lo van a dejar solo?”, preguntó a los presentes, evidenciando a un Maduro solitario.
Los artistas se han quejado de la utilización de sus imágenes para promocionar la Constituyente. Norkys Batista y Daniela Alvarado, conocidas figuras del teatro y las telenovelas, han protestado la manipulación de sus figuras en posters de campaña a favor de la convocatoria de Maduro. La reacción fue airada: “¡Qué clase de locos! Nadie les cree nada, están desesperados y asustados y no encuentran qué inventar. ¿Qué porquería es esta?”
En una especie de última hora, circuló que Estados Unidos podría catalogar a Pdvsa (principal empresa pretrolera de Venezuela) como una “industria criminal” lo que prohibiría a la petrolera transacciones en dólares. Hoy, la represión de la dictadura venezolana es titular principal en edición impresa del New York Times.
El comando de la oposición ha trazado una dura agenda de calle para esta semana que incluye la paralización total del país por 48 horas que culminará en una gran toma de Caracas, para lo cual están convocando al país hacia la capital. Podríamos estar a las puertas de la semana más peligrosa hasta el sol de hoy.
FUENTE: es.aleteia.org
