Dona DSPM armas de utilería al Pentathlón Deportivo Militarizado Universitario

– Son armas no letales que son aseguradas o encontradas por policías y que servirán para sus entrenamientos

Chihuahua- Miembros del Pentathlón Deportivo Militarizado Universitario de la zona Chihuahua recibieron de manos de funcionarios de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, armas de utilería no letales que han sido decomisadas por mal uso, o bien o encontradas por los policías preventivos y que, sin duda, les servirán a ellos para realizar sus entrenamientos y actividades deportivas.

Por tratarse de armas que no se consideran letales para las personas, la corporación policial tiene la facultad de destruirlas u otorgarlas en donación, a diferencia de las de fuego, que deben ser entregadas a la autoridad correspondiente cuando son decomisadas en operativos, detenciones o encontradas en la vía pública.

El Pentathlón Deportivo Militarizado Universitario (PDMU) es una organización civil militarizada, surgida en 1938 en la Ciudad de México como iniciativa de Gustavo Baz Prada, quien un día antes de ser nombrado rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el 20 de junio de ese año, reunió en una cafetería cercana a la universidad a 12 estudiantes de la Facultad de Medicina, convocándolos y cambiando impresiones sobre lo que consideraba una desmoralización de la juventud mexicana, causada por la ruina en que se encontraba el país, apenas terminada la Revolución, trasmitiéndoles la idea de formar un grupo o institución que tuviera principios nacionalistas, deportivos y con una disciplina de carácter militar.

Ricardo García Márquez, subdirector de Justicia Cívica de la DSPM, fue quien, en el Centro de Mando de la Comandancia Norte, hizo entrega de la utilería al comandante de la Sub-Zona Chihuahua, Pedro Raúl Reyes Silva, quien se comprometió a fomentar la actividad deportiva y terapéutica en los jóvenes que pertenecen a la organización a su cargo.

La entrega se realizó de acuerdo a las directivas que se establecen en el Manual de Procedimientos de Calea, para garantizar el correcto y transparente destino de aquellos objetos asegurados o no reclamados que no pueden ser devueltos a sus propietarios debido al uso ilícito que se les dio.