Chihuahua.- Para 2021, el estado de Chihuahua sufrirá una disminución de 3 mil 144.4 millones de pesos, provenientes de las participaciones federales, una de las mayores afectaciones económicas de toda la historia.
Así lo expuso la diputada Rocío González, al exigir desde el Congreso del Estado que se restructure el presupuesto 2021.
“Llamó a la conciencia de los diputados federales, no es posible que en medio de una de las peores crisis tanto de salud como económica, nos vayan a castigar con una reducción tan agresiva en el presupuesto nacional”, detalló la legisladora dentro de la sesión ordinaria del Congreso del Estado.
Lo más extraño es que, durante 2021, el Presupuesto Federal tendrá un aumento considerable a comparación de lo ejercido durante este año, sobre todo porque los fondos de los ramos 33 y 28, que principalmente eran destinados a estados y municipios, lo gastará directamente la federación.
El Ramo 33, es el recurso que envía la Federación a los estados para un gasto previamente etiquetado, mientras el Ramo 28, es el dinero que no está etiquetado y se otorga a las entidades de acuerdo a su tamaño, aportación al PIB y recaudación.
“Es muy alarmante ver cifras que exponen a todas luces lo egocéntrico que puede llegar a ser el Presidente, ya que es más importante para él terminar los proyectos que surgieron como un capricho, en vez de atender la realidad que enfrentan a diario los mexicanos”, sentenció.
Es por eso la necesidad de exhortar a quienes integran la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados, para que dentro de los trabajos de análisis, discusión y aprobación de presupuesto del siguiente año, puedan reestructurar los montos y asignarle más recursos al estado.
Chihuahua, en términos de asignaciones del gasto público, sufrirá una disminución de 3 mil 144.4 millones de pesos, es decir, sólo podrá contar con 77 mil 713.7 millones de pesos, en comparación con los 80 mil 858.1 millones que se ejercieron este 2020.
Esto es una muestra clara de que la actual política federal, contempla dejar de lado el crecimiento interno tanto estatal como municipal, a pesar de ser las autoridades inmediatas en la solución de problemas de primera necesidad, como la pobreza, seguridad, alimentación, y prestación de servicios básicos.
